DÍAS ATRÁS, el secretario de la Fundación dos Ferrocarrís de Galicia, Luis Blanco Gómez, le pedía a los responsables del Ayuntamiento de Monforte que colocasen en las carreteras de entrada a la ciudad unos carteles con la leyenda Monforte, ciudad ferroviaria. Visite nuestro museo del tren. El motivo de la petición no es otro que darle mayor visibilidad a un espacio museístico único en España que apenas es conocido. Es una pena, pero es así. Hasta ahora muy pocos, dentro de Galicia, saben de su existencia y de las piezas que atesora, buena parte del pasado ferroviario español, totalmente restauradas y hasta operativas para circular por las vías.
Si fuese otra persona la que llevase las riendas de la fundación y del museo del ferrocarril instalado en antiguas dependencias ferroviarias de Monforte hubiese tirado la toalla hace tiempo, pero Luis Blanco Gómez, no. Su tesón y paciencia son envidiables.
Allá por 1996 reunió en un antiguo molino, reconvertido en casa de turismo rural situado en Os Peares, a agentes sociales y políticos para explicarles su idea, que no era otra que montar un museo del tren con piezas cedidas por Renfe. Su proyecto fue entendido como una quimera, pero este monfortino no cejó en su empeño de hacer realidad su sueño y se puso manos a la obra. Su trabajo, invisible para las instituciones públicas que no creían en su proyecto, consistió en convencer a la empresa nacional ferroviaria de que su planteamiento era realizable. Así, en los inicios del año 2000 consiguió la primera pieza para el museo, una locomotora de vapor Mikado.
Si fuese otra persona la que llevase las riendas de la fundación y del museo del ferrocarril hubiese tirado la toalla hace tiempo, pero Luis Blanco Gómez, no
El estado en el que llegó a la ciudad del Cabe hacía pensar que era irrecuperable, pero una vez más el tesón de Luis Blanco sirvió para conseguir una escuela taller y el apoyo de antiguos ferroviarios para restaurarla. El resultado está ahí. Desde hace años es el emblema del museo y la envidia de cualquier asociación de amigos del ferrocarril o centros museísticos ferroviarios de España.
Y siguió hasta disponer de otras locomotoras emblemáticas, como una diésel y otra eléctrica, coches de viajeros y restaurante, furgones, vagones y un largo etcétera de material, así como rehabilitar la antigua rotonda de la estación, única en España por sus características y que es operativa. Solo quedan otras dos en España, una en Santander, que usan los talleres de Renfe, y otra en Vilanova i la Geltrú.
No seguiré relatando todo lo conseguido por el museo del tren, por Luis Blanco, pues ahora toca hablar de las piedras que se ha ido encontrando en el camino y que conozco bien por haber seguido de cerca el nacimiento y evolución tanto de la fundación del ferrocarril como del museo.
Todas esas piedras se pueden resumir en una falta de apoyo de las instituciones públicas hacia un proyecto que se podía comprobar que no era una quimera. Las ayudas llegaron con cuentagotas. Incluso hoy, con todo ese material histórico totalmente restaurado y operativo, sigue sin existir el necesario respaldo de las administraciones públicas, que no es que tengan una venda en los ojos que les impida ver lo que hay, sino que se los cierran y se los tapan con las manos, lo que a uno le hace preguntarse por los motivos de esa ceguera voluntaria.
El museo del ferrocarril que tenemos en la ciudad más ferroviaria de Galicia en cuanto a historia necesita ser más visible, contar con más apoyo
El museo del ferrocarril que tenemos en la ciudad más ferroviaria de Galicia en cuanto a historia necesita ser más visible, contar con más apoyo, que sus trenes, que el Galaico Expreso, pueda volver a salir a la vía.
Sí, estamos en tiempos de crisis económica, pero seguro que el museo agradecería, y mucho, algún gesto, por pequeño que fuese, que demostrase que se sabe de su existencia y de la necesidad de que se mantenga en el tiempo.
De lo contrario, sin ayuda pública, mucho me temo que las piezas ferroviarias serán reclamadas por Renfe e irán a parar a otras ciudades españolas.
Ayuntamiento de Monforte o empresa hostelera
El anuncio de los responsables del Ayuntamiento de Monforte de abrir una cafetería en un antiguo coche de viajeros, cedido por la Fundación dos Ferrocarrís de Galicia, a instalar en el parque de Os Condes ha causado no pocas chanzas entre la ciudadanía, que se pregunta si hablamos de una administración pública o de una empresa hostelera.
Y es que cuando esta iniciativa sea una realidad serán cuatro las cafeterías con las que cuente el Ayuntamiento. En la actualidad están operativas y cedidas por un módico alquiler las situadas junto a la plaza de abastos, en el Centro do Viño y en el centro cívico del Paseo do Malecón.
El Sergas se ha defendido hasta ahora, pero tras la manifestación en la que el miércoles participó medio millar de personas no ha abierto la boca, se ha quedado mudo
Algunos profesionales de la hostelería de Monforte hablan de una competencia desleal, pues creen que la administración local no debe estar para abrir locales de ocio. Los de la zona centro de la ciudad no ven con buenos ojos lo del coche de tren en el parque porque saben que tendrá clientes que les restará a ellos.
En Brollón exigen una atención sanitaria de calidad
Los vecinos del municipio de A Pobra do Brollón se han echado a la calle, por segunda vez en tres meses, para reclamar que se cubra la plaza de un médico en el centro de salud al encontrase de baja su titular desde el pasado mes de agosto. El Sergas la ha cubierto de forma parcial, algo que el vecindario considera que no es una solución adecuada, sino un parche.
El Sergas se ha defendido hasta ahora, pero tras la manifestación en la que el miércoles participó medio millar de personas no ha abierto la boca, se ha quedado mudo.
En A Pobra do Brollón saben qué partido es el que lleva las riendas del Servizo Galego de Saúde y que habrá elecciones municipales dentro de muy poco. Algunos habitantes ya han advertido de que mostrarán su protesta en las urnas el próximo 24 de mayo.
Habrá que esperar para saber si el Sergas maniobra a tiempo para impedir una posible sangría de votos en este municipio del sur lucense.
Artículo publicado el sábado, 28 de marzo de 2015 en la edición impresa de El Progreso. Se mantiene el idioma original.
