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Los tiempos en la moda

La New York Fashion Week llegó con polémica, al desmarcarse diseñadores y reivindicar otros calendarios para presentar las colecciones

LA SEMANA de la Moda de Nueva York ha dado, un año más, el pistoletazo de salida al calendario de estos deslumbrantes eventos. Entre los pasados días 7 y 15, la New York Fashion Week mostró sobre las pasarelas las más variopintas propuestas, para la próxima primavera-verano de 2017, de grandes agujas de la alta costura como Alexander Wang, Carolina Herrera, Óscar de la Renta, Marchesa, Ralph Lauren, Delpozo o Marc Jacobs, por citar solo a unos cuantos.

SIN ESPERAS. Al margen de las numerosas propuestas estéticas que se han visto en este arranque de las semanas de la moda —al que seguirán en próximas fechas las de París, Milán, Londres o Madrid, en uno de los meses más potentes del ano para la gran industria de la moda—, esta cita ha comenzado con una nueva polémica en torno a posibles cambios de calendario.

De llegar a materializarse, estas modificaciones supondrían un auténtico huracán en los tiempos de la moda tal y como se han venido conociendo durante décadas en cuanto a presentaciones de colecciones y temporadas. Al amparo de la idea de que los diseños que presenten sobre las grandes pasarelas mundiales puedan llegar de inmediato a los armarios de sus clientes, sin tener que esperar meses y meses para hacerse con las codiciadas piezas, nombres relevantes del sector como Mathew Williamson, Rebecca Minkoff, Thakoon o Tom Ford dieron el campanazo hace unos meses anunciando que se iban a desmarcar del, a su entender, anacrónico y obsoleto calendario de la moda.

Dicho y hecho, por ejemplo, en el caso de Tom Ford, cuyo nombre ya no ha aparecido en esta recién clausurada edición de la Semana de la Moda de Nueva York. El pasado mes de febrero cancelaba su asistencia a este evento argumentando que no presentaría su colección de otoño/invierno hasta que no llegase el momento exacto de poder utilizarla, es decir, ahora. Y así fue.

Solo un día antes de que el resto de grandes firmas inaugurasen oficialmente la New York Fashion Week, el diseñador americano presentó su colección en un restaurante de Nueva York ante 180 exclusivos invitados, entre ellos la supermodelo y empresaria Naomi Campbell.

PESOS PESADOS A FAVOR DE LA TRADICIÓN. Pero los que se oponen de plano a esta pretendida renovación del calendario de la moda no lo van a poner fácil. Al contrario, la polémica está servida, y uno de los diseñadores que más se ha encargado de alimentarla es nada menos que Karl Lagerfeld.

En la pasada edición de la Semana de la Moda de Milán, el káiser valoró este posible cambio como un "auténtico desastre" si llegase a darse, argumentando la necesidad de dar a los clientes el tiempo necesario para hacer su elección y a los equipos de diseño el suyo para "producir las cosas bien".

El tiempo dirá qué opción es la que triunfa.

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