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Alfombra roja a análisis

Un repaso a los estilismos, tanto de las mejor como de las peor vestidas en la 74ª edición de los Globos de Oro, entregados recientemente


LOS MEJORES vestidos y looks han podido desfilar sobre una elegante alfombra roja en la 74ª edición de los Globos de Oro. Las actrices de Hollywood han sido objetivo de las cámaras y se ha hablado mucho de qué llevaban puesto. Ha costado poder elegir entre todas las celebrities a las mejores vestidas de este evento, pero repasamos los cuatro mejores looks de toda la gala.

Emma Stone ha sido una de las más comentadas junto al elegante vestido con capa de Mandy Moore. A la primera, estamos acostumbrados a verla siempre impecable y esta vez no podía ser menos. Es por ello que no nos extraña que esté en nuestra selección de mejor vestidas de los Globos de Oro. Eligió una de las tendencias estrella de la temporada: las estrellas, valga la redundancia. El estampado estrellado viene pisando fuerte y aunque estemos acostumbrados a verlo en tonos blancos y negros, la actriz eligió un vestido en rosa palo de Valentino con estrellas plateadas. Perfecta para recibir el premio a mejor actriz en comedia o musical por La La Land. Para mi gusto y el de muchos medios de comunicación, además de redes sociales, la mejor vestida de toda la noche.

Escote de vértigo fue el que llevó Mandy Moore, que estuvo más que acertada al elegir un diseño con mucha clase y estilo de Naeem Khan. Además del pronunciado escote, contaba con una capa transparente que aportaba el toque distinto y convertía la prenda en especial.

Con sus casi dos metros de altura, no es fácil encontrársela en el podio de las mejor vestidas pero la actriz de la serie que está arrasando, Juego de tronos, lo ha conseguido con un vestido en color nude de Vivienne Westwood.

Blake Lively no falla si hablamos de sensualidad. Para mi gusto, la más sexy de la noche, con un vestido de Versace de terciopelo negro y lentejuelas doradas que marcaba su cintura y realzaba su figura.

Otras que se han quedado muy cerca del podio han sido Evan Rachel Wood, con un esmoquin de Altuzarra. O Brie Larson, la única que eligió el color rojo, vestida de Rodarte. Las actrices han acertado con sus elecciones y muchas han demostrado que las supersticiones es mejor dejarlas en casa, apostando por el amarillo. Fue el caso de Viola Davis, Maisie Williams, Reese Wirherspoon o Natalie Portman. Otras, sin embargo, han fracasado en su intento de elegancia, clase y buen gusto. Monica Bellucci, que siempre va perfecta, ha patinado esta vez eligiendo un vestido negro nada favorecedor e incluso fúnebre. Bonito fue el detalle de Sarah Jessica Parker inspirándose en la princesa Leia y rindiendo homenaje a la fallecida Carrie Fisher, con vestido blanco de corte princesa con escote y aberturas en los hombros de Vera Wang. Lástima que resultase sobrecargado y forzado

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