La promotora y presidenta de la Fundación Eduardo Barreiros, Mariluz Barreiros, ha resaltado este miércoles su "emoción inmensa" por recibir el Premio Ourensanía, que ha considerado como "un reconocimiento a la obra de mi padre" ya que muestra "su contribución en el desarrollo industrial" de España.
Con estas palabras, la presidenta de esta fundación, que está dedicada a la perpetuación de la memoria del impulsor de la industria del automóvil en la España de mediados del siglo XX, ha dedicado este premio a su padre, "germen del sector de la automoción tan decisivo hoy en día en nuestro país, en cuanto a Producto Interior Bruto (PIB), empleo y a exportación".
Barreiros ha recibido la figura de bronce de manos del presidente de la Diputación de Ourense, Manuel Baltar, en el transcurso de un acto que tuvo lugar en el Teatro Principal de la ciudad de las burgas.
Además del presidente provincial, este acto contó con la presencia del alcalde de Ourense, Jesús Vázquez, además de numerosas personalidades del ámbito empresarial, social y cultural de toda Galicia. Previamente, la premiada realizó el recorrido desde la institución provincial al Teatro Principal, en una comitiva que estuvo encabezada por la Real Banda de Gaitas de la Diputación de Ourense.
Durante su discurso, Barreiros dedicó sus primeras palabras a los promotores de este premio, en concreto al presidente de la institución provincial y al jurado, a quienes agradeció este galardón, que reconoce la contribución de toda la familia Barreiros y en especial de su padre, a la industria del automóvil.
Con un emotivo discurso, la hija del empresario no desaprovechó su oportunidad de dedicar sus principales palabras a su padre, Eduardo Barreiros, un hombre "profundamente gallego y que llevó a Ourense en su corazón" y del que destacó su "afán de superación, dedicación extrema" y su enorme "tesón".
Por su parte, Baltar resaltó que Eduardo Barreiros fue "el motor de la irrenunciable ambición colectiva del pueblo orensano". En esta línea, resaltó el protagonismo de la premiada como "embajadora de Ourense y del mundo", provincia de la que destacó su carácter "trabajador, emigrante y creativo", palabras que a su juicio "encajan perfectamente" con Mariluz Barreiros.
LA HISTORIA DE EDUARDO BARREIROS. Promotor de la industria automovilística en La Habana de los años 80, fue uno de los artífices del desarrollo industrial de la automoción basado en la transformación de los motores de gasolina en motores diésel, que tantos éxitos nacionales e internacionales le concedió en la antagónica España de los años 50 y 60.
De sus recuerdos, Mariluz Barreiros resaltó la enorme vinculación que tuvo Eduardo Barreiros con Ourense, provincia en la que recorrería "la ruta de Os Peares" y realizaría sus primeros pinitos como "mecánico y conductor". Allí, acostumbró a "mancharse las manos", abundó la premiada.
Años después, Eduardo Barreiros dio el salto a la transformación de los motores de gasolina en diesel y abrió la primera nave industrial de Galicia con siete operarios, una perfecta maquinaria que no dejaría de crecer con el paso del tiempo.
"Quince años más tarde abrió el complejo industrial", en Villaverde, en la que dio empleo directo a 25.000 trabajadores y creó unos 100.000 puestos de trabajo indirectos, incrementando sus exportaciones, recordó Mariluz Barreiros.
Un éxito en el que la homenajeada no quiso olvidarse de la "lista interminable" de colaboradores gallegos que participaron en este proyecto con Eduardo Barreiros.
