Las sustracciones al lado del Hula bajan, pero crece la indignación

La ciudadanía responsabiliza de los robos a los aparcacoches ilegales ► En Change.org se recogen firmas para prohibir su actuación

Entre los robos que más indignan a los lucenses están sin duda las sustracciones que se comenten en los turismos estacionados cerca del Hula. Los ciudadanos tienen claro que son obra de los gorrillas y exigen que se tomen cuanto antes las medidas necesarias para frenar su actuación.

El jefe de la brigada de Policía Judicial de la comisaría lucense, Guillermo Bravo, señala sin embargo que los robos en el entorno del Hospital Universitario Lucus Augusti se han reducido de forma considerable. "Las denuncias por este tipo de sustracciones disminuyeron mucho. Sigue habiendo un goteo de casos, pero se establecieron varios dispositivos de vigilancia y ya no es lo mismo. Al principio, los delincuentes rompían las ventanillas de los turismos una tras otra, aunque dentro no hubiera nada que pudieran llevarse. Ahora, cuando actúan, es porque han visto que dentro del coche hay algún objeto de valor. También robaron en varios taxis porque saben que puede haber dinero de la recaudación".

Como los cacos van a tiro fijo, la Policía Nacional recomienda no dejar a la vista ordenadores, bolsos, ni ningún otro artículo que pueda llamar la atención de los cacos, "ya que si ven algo que les pueda reportar algún beneficio" comenta, "no van a dudar en intentar llevárselo".

Los asaltos violentos a personas bajaron un 30% en el municipio. La mayoría de las sustracciones son hurtos al descuido

La ciudadanía achaca estos robos a los aparcacoches ilegales y exigen al Concello de Lugo que tome medidas, ya que muchos conductores denuncian que los gorrillas los amenazan cuando no les dan dinero e incluso causan daños en los vehículos.

FIRMAS. Ante esta situación, aunque los robos disminuyan, la indignación ha llegado a tal punto que un grupo anónimo –identificado simplemente como usuarios del Hula– abrió una petición de firmas en el sitio de Change.org reclamando que la alcaldesa expulse a los gorrillas del entorno del hospital. En las primeras 24 horas, la petición reunió cerca de 300 firmas.

Muchos de los firmantes incluyeron un comentario y la mayoría calificaron de "extorsión" y "chantaje" el hecho de que los gorrillas pidan dinero por dejar aparcar en un espacio público. Recuerdan que las visitas al hospital no suelen ser gratas y lamentan que, a la preocupación por la salud de algún familiar, tenga que sumarse por la del estado en el que se encuentre su coche.

Las quejas se centran sobre todo en la pasividad del Ayuntamiento con un problema que viene existiendo desde que se abrió el centro hospitalario.

Además, los lucenses temen que la "impunidad" con la que actúan los aparcacoches ilegales en esa zona los lleve a extender su actuación a otros puntos. De hecho, los gorrillas llegaron también a actuar en la capital en los últimos meses, aunque ocasionalmente, en el aparcamiento del Seminario, donde están las oficinas municipales, y en el nuevo que habilitó el Club Fluvial en Fermín Rivera.

Comentarios