Marino Giménez coordinó el intento de asalto a los narcos, dice la Policía

La Fiscalía pide para los procesados, entre ellos el Guardia Civil y los dos narcotraficantes que fueron víctimas del robo, penas de cárcel que oscilan entre los 4 y los 12 años
Marino Giménez, a las puertas del juzgado
photo_camera Marino Giménez, a las puertas del juzgado

Un efectivo de la Policía Nacional que intervino en el operativo que derivó en la detención de una banda acusada de intentar robar a otros narcos una partida de cocaína con la colaboración de un agente de la Guardia Civil ha revelado que Marino Giménez, miembro del clan de los Morones, era el "coordinador de esta operación".

Lo ha hecho durante la segunda jornada del juicio por estos hechos, celebrada esta mañana en la Sección Quinta de la Audiencia de Pontevedra, con sede en Vigo.

El hombre, que en su momento actuó como secretario de diligencias, ha explicado que la línea de investigación que derivó en la detención de esta banda estaba, en un inicio, "centrada en el clan familiar de los Morones" es su conjunto.

Ha concretado que Marino fue "objeto de investigación desde el principio" ya que los agentes sospechaban "que se dedicaba al narcotráfico", y ha expresado que este procesado hacía gala de una "actividad ilícita frenética" por aquel entonces.

Según este agente policial, Marino Giménez, hermano de Sinaí Giménez, autoproclamado príncipe de los gitanos gallegos, se erigió en "coordinador" de la banda que en enero de 2014 planeó asaltar a unos traficantes y quitarles medio kilo de cocaína.

Para ello, simularon un control de la Guardia Civil en una gasolinera de Mos, donde un agente, Enrique P.M., también procesado en esta causa, procedió a dar el alto a los narcotraficantes.

El secretario de diligencias, que ha comparecido como testigo, ha hablado de "la superioridad" de Marino sobre Enrique, un hombre que "obedece" lo que el primero propone "y busca optimizar el momento en el que desarrollar" el asalto.

El objetivo, ha dicho, era "realizarlo con la mayor seguridad" y utilizar su condición de agente de la autoridad para aportar "un halo de legalidad" a la actuación.

Además, ha defendido que "los únicos" procesados que conocían todos los datos sobre el golpe eran Marino y Marcos G. B., mientras que los demás eran "utilizados por estos".

De hecho, ha comentado que los dos primeros llegaron incluso a "intentar estafar" a uno de los miembros de la banda "engañándole" para que recibiese menos dinero tras el asalto.

Así las cosas, el agente de la Policía Nacional ha definido a Marino como "el coordinador", aunque ha reconocido que "nunca dio la cara durante el trasvase" de la mercancía, mostrando siembre una "relación de superioridad" con respecto al resto, quienes le "le hacen caso en mayor parte".

La Fiscalía pide para los procesados, siete en total, entre ellos el Guardia Civil y los dos narcotraficantes que fueron víctimas del asalto, penas de cárcel que oscilan entre los 12 años hasta los cuatro años y seis meses.

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