Francisco Rodríguez Vílchez, Francisco encabeza la terna de entrenadores que maneja el Lugo para sustituir a Luis César Sampedro. El joven técnico andaluz de 39 años estaría muy cerca de ocupar el banquillo rojiblanco para la próxima temporada en el que sería el tercer equipo de su corta trayectoria como preparador tras su paso por el Almería en Primera División y el Ucam Murcia la pasada campaña en Segunda.
El propio Francisco, en declaraciones a este periódico, indicó que todavía desconoce si será el elegido final por el presidente del Lugo, Tino Saqués, y afirmó que debe «seguir esperando» la decisión del club, aunque deseó que pueda «salir» la operación y se siente en el banquillo del Ángel Carro.
«De momento no puedo decir nada. Hay que seguir esperando, pero ojalá que pueda salir (el fichaje) porque son proyectos que a uno le ilusionan», destacó Francisco sobre su posible llegada al Lugo.
«Lo que sí tenemos es hambre de crecer en el fútbol», declaró el ex del Almería y el Ucam ante la posibilidad de recalar en un equipo como el Lugo.
Lo que no esconde el entrenador almeriense es su deseo de recalar en el conjunto rojiblanco y califica al Lugo como un «destino perfecto».
Francisco también se mostraría conforme con la plantilla de jugadores de la que dispondría en el club. «Todo es perfecto, de verdad que sí», respondió tras ser preguntado sobre la idoneidad de los futbolistas del Lugo para el fútbol que ha desarrollado a lo largo de su carrera como preparador profesional.
ESTILO AJUSTADO AL LUGO. El tipo de juego desarrollado por los equipos de Francisco se ajusta a la perfección a lo que el Lugo lleva desarrollando desde el aterrizaje de Quique Setién en 2009. Tanto con la anterior directiva como la actual, con Tino Saqués al frente, se han caracterizado por técnicos que opten por el juego posicional como base.
Tanto el Almería de la 2013-2014 y 2014-2015 en Primera División como el Ucam de la pasada campaña mostraron un fútbol ofensivo sin descuidar la solidez y la competitividad como grupo.
Francisco suele optar por el 4-2-3-1 como esquema, lo que sería un plus para una plantilla que ha jugado toda la temporada bajo ese mismo dibujo con Luis César.
El carácter trabajador y perfeccionista, junto con la buena gestión de los recursos con los que cuenta son otros de los puntos a favor de un entrenador aún en crecimiento pero con una buena experiencia en su incipiente carrera.
