La Estación Científica busca un cambio y que su trabajo beneficie más a la zona de O Courel

La Universidade de Santiago de Compostela (USC) agradecerá este sábado a los vecinos de O Courel su implicación en la puesta en marcha de la Estación Científica que abrió sus puertas en la localidad de Seoane en junio del año 2010. El acto también quiere marcar un punto de inflexión y ser el inicio de una nueva etapa en la vida del centro, más dinámica y en la que la actividad repercuta más directamente en la vida en la montaña.

El actual director de la estación, Antonio Rigueiro, aclaró este miércoles que el papel de los vecinos fue "moi importante" para el desarrollo del proyecto ya que incluso llegaron a colaborar económicamente. "Cando se acordou establecer alí a Estación Científica, a veciñanza traballou a favor do proxecto dende o primeiro momento e incluso recolleu cartos para mercar o solar no que se ubicou a escola", comentó Antonio Rigueiro.

Así que, según reconoce el propio director, "despois de sete anos de actividades é merecido un pequeno recoñecemento ao seu papel", añadió.

La estación comenzó a funcionar en el año 2010, pero en realidad el proyecto llevaba una década gestándose y las obras se acometieron entre los ejercicios 2007 y 2010. Desde el principio se configuró un centro dirigido a fomentar la docencia y la investigación en la montaña, pero también orientado a "mellorar o nivel cultural dos veciños da montaña e ofrecerlles alternativas para sacar un territorio único adiante", destacó Rigueiro.

El objetivo era que la estación fuese un punto de actividad muy vivo con estancias para investigadores, cursos, exposiciones, presentaciones de proyectos de fin de carrera y tesis doctorales y todo tipo de iniciativas. De hecho, el centro cuenta con salas y estancias orientadas a este tipo de trabajos, pero también dispone de dormitorios para los investigadores que quieran pasar allí un tiempo.

Además, estaba entre los retos iniciales de la estación convertirse en un revulsivo a nivel local y que su actividad repercutiese en la hostelería, el turismo y el comercio.

Siete años después de aquella apertura, el propio Antonio Rigueiro reconocía este miércoles que ese dinamismo no se había consumado al menos por el momento. "Os recursos da USC para docencia e investigación caeron en picado durante os anos da crise económica e, en consecuencia, a estación de Seoane tamén se viu prexudicada por esa merma de fondos". El profesor añadió que "temos que recoñecer que o ritmo de actividade non está sendo da intensidade que se prognosticou nos inicios, pero agardamos ir recuperando pouco a pouco dinamismo e dar resposta ás metas plantexadas".

En la actualidad, la escuela alberga media docena de cursos al año de la propia USC, jornadas programadas por este organismo y también por asociaciones y colectivos vinculados a la montaña, presentaciones de tesis doctorales, actividades escolares y otras iniciativas. Queda pendiente relanzar más la faceta de estancias de investigación.

EN MARCHA. Antonio Rigueiro destacó que uno de los principales planes a corto plazo que hay para la Estación Científica de Seoane do Courel es el del desarrollo del micoturismo en esta parte de la montaña lucense. Rigueiro añadió que para ello están en fase de programación cursos sobre micología, sesiones de cocina para hosteleros, jornadas de divulgación de las especies predominantes en la zona e incluso alguna fiesta o evento de exaltación.

Detalló el director que lo que se pretende es darle un impulso a la micología en la montaña similar al que tiene el mundo de la castaña. "Este froito é un atractivo indiscutible de toda a serra do Courel que cada ano atrae centos de visitantes ao contorno para desfrutar da paisaxe, facer rutas a pé, probar a gastronomía y acudir á festa anual. O reto coas setas é conseguir ese mesmo tirón e que se convirtan noutro dos produtos que tiren da vida na montaña e xeren ingresos para a poboación local".

Otro de los planes esbozados por la estación con el apoyo de la Diputación de Lugo es el de poner en marcha un aula sénior de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (Uned). El proyecto no tiene fechas, pero sería una alternativa para ofrecerle formación reglada a la población adulta de la sierra.