La portavocía de Anova será elegida por la coordinadora nacional, y no por la Asamblea, formada por la totalidad de la militancia, al contrario de la anterior ocasión, en la que resultó elegido Xosé Manuel Beiras.
Esta postura, defendida por el actual coordinador de la formación, Martiño Noriega, aboga además por un liderazgo compartido, para evitar de esta forma que el cargo de portavoz nacional se asocie al de secretario general de otros partidos clásicos.
Este ha sido uno de los acuerdos, adoptado por apenas 30 votos de diferencia, a los que se ha llegado en la primera parte de la II Asamblea de Anova, que tiene lugar en Compostela y que se clausurará este domingo.
De esta forma, el portavoz nacional será elegido por los 105 miembros de la Coordinadora, 75 elegidos entre 176 candidatos y otros 30 elegidos en las áreas territoriales.
Otro de los asuntos que ha presentado mayores discrepancias en la primera jornada ha sido la readmisión, por 156 votos a favor y 107 en contra, de los 17 militantes que fueron expulsados de la agrupación de Redondela el pasado año.
Durante la exposición de este punto se han producido fuertes abucheos entre los militantes de la formación, e incluso casi una decena de ellos han abandonado el plenario durante la intervención de Rafael Balado, uno de los militantes expulsados y finalmente readmitido.
En todo caso, Francisco Trigo, en su exposición de enmienda a esta readmisión, ha apuntado que recurrirá la votación al considerar que los expulsados no podrían haber participado en las votaciones al no formar parte de la militancia en el momento de la votación.
"Es una ilegalidad absoluta que estén votando" ha insistido Trigo.
Al finalizar la jornada de mañana, el coordinador de Anova, Martiño Noriega, ha valorado el "intenso" debate llevado a cabo entre la militancia. "Por debate que no sea", ha dicho.
El encuentro vivió otra votación aún más ajustada, por la que se rechazó una enmienda a los textos organizativos que proponía acabar con la doble militancia. Esta propuesta fue derrotada por apenas una docena de votos.
La asamblea de Anova, además, aprobó este sábado sus informes de gestión y el documento económico, del que se deducen unas cuentas saneadas que se cerraron con superávit en 2013 y que apuntan que, en lo que va de año, han ingresado de cuotas de militantes y por su representación parlamentaria 114.882 euros. En las cuentas bancarias, la formación dispone de 64.921,56 euros, según informa Europa Press.
