El principal favorito para hacerse con las acciones del CD Lugo propiedad del Concello y la Diputación, Tino Saqués, tendrá que pagar al contado y en un solo pago los 1.600.500 euros para comprar los 150.000 títulos que lo convertirían en el máximo accionista del club. Los servicios técnicos del organismo provincial consideraron que el empresario lucense no especificó en su oferta que adquiriría las acciones a plazos, por lo que deberá hacerlo en un único desembolso y en el plazo de un mes, tal y como se establecía en las bases iniciales del concurso de venta del paquete accionarial.
Los servicios técnicos de la Diputación, tras estudiar el caso en profundidad, llegaron a la conclusión de que Saqués no podrá modificar a posteriori los términos de la oferta presentada, ya que supondría una ventaja con respecto al otro candidato a hacerse con la adjudicación de los títulos. En el caso de poder cambiar las ofertas una vez concedidas las acciones, el otro candidato podría haber pujado por una cantidad mayor si los plazos de pago eran convenientes a sus intereses.
Una vez le sean adjudicadas las acciones y sea el departamento de contabilidad de la Diputación el que se ocupe del cobro de los títulos, se informará al empresario lucense de que deberá pagar toda la cantidad –1.600.500 euros– en el plazo de un mes "al día siguiente de aquel en que reciba la notificación del acuerdo de adjudicación", tal y como indica la cláusula doce de las bases del concurso público publicado el sábado 17 de enero.
De esta manera, en caso de confirmarse el pago único, se desvanecería la razón principal de Tino Saqués para concurrir a la apertura del segundo concurso. El empresario había afirmado en la rueda de prensa concedida el jueves 12 de marzo que había renunciado en primera instancia a hacer una oferta por todos los títulos por el coste que suponía hacer el elevado desembolso en un solo pago.
"El pago aplazado era una opción muy atractiva para nosotros o para cualquiera. Mi departamento financiero vio con buenos ojos esa posibilidad", admitió Saqués cuando fue preguntado por su presentación al concurso en el mes de enero, cuando inicialmente no lo había hecho en la primera convocatoria de diciembre.
NEGOCIACIÓN. Tino Saqués también señaló el 12 de marzo que iniciaría una negociación con la Diputación para determinar la cuantía y los pagos a realizar para pagar las acciones. El empresario indicó que dependería de diferentes "acontecimientos". Saqués llegó a hablar incluso de pago al contado en caso de obtener contrapartidas por parte de la Diputación, como el hecho de la devolución de las subvenciones de los últimos dos años que dejó de percibir el club lucense, como parte del acuerdo inicial de adquisición de las acciones en el proceso de conversión del club en Sociedad Anónima Deportiva (SAD).
"Ahora mismo, para pagar al contado quiero una negociación", afirmópor entonces Saqués, quien añadió que "si no hay contrapartidas pagaré a plazos". "Si me presenté fue por el pago aplazado", apostilló.
El empresario lucense dejó caer que podría renunciar finalmente a la compra de las acciones debido a la presión que está sufriendo por parte de una parte de la afición lucense, posicionada en su contra.
"Estoy sopesando muy mucho si voy a seguir adelante. Prefiero que me valoren una vez que conozcan mi trabajo", destacó Tino Saqués durante aquella rueda de prensa.
La mesa técnica se reunirá este lunes de nuevo tras haberlo hecho el pasado lunes para estudiar la valoración de los proyectos de los dos candidatos a hacerse con las acciones, realizada por la empresa a la que se adjudicó este servicio.
Además, este martes también se estudiará el informe sobre si el objeto social de Frisaqués, la empresa de Tino Saqués, puede impedir a la firma comprar las acciones del Lugo.
