El presidente del PP de Lugo, José Manuel Barreiro, quiso hacer "autocrítica" después de que su partido perdiese el 24-M 27.000 votos en la provincia con respecto a los cosechados cuatro años antes. Pese a que defendió que siguen siendo «a forza máis votada» también en la capital de la provincia, Barreiro cree que la caída de apoyos no solo obedece a una cuestión de política nacional o autonómica, sino también con problemas en los ayuntamientos, por lo que considera que el partido probablemente «terá que afrontar cambios», dijo, que se abordarán caso por caso.
El líder del partido en la provincia, que en todo caso aseguró que se mantendrá en el cargo al menos hasta la celebración del próximo congreso provincial, considera que escudarse en que el PP sigue siendo la primera fuerza de Lugo para justificar una continuidad en la forma de actuar sería "perder a perspectiva". "Hai que facer autocrítica. Temos que analizar o que pasou en cada sitio e iso implica unha reflexión de cada un no persoal e no político", comentó Barreiro, quien invita a analizar si hubo problemas internos o de composición de candidaturas que provocasen la pérdida de gobiernos y votos, para tratar de buscar soluciones particulares.
ALCALDÍA DE LUGO. En el caso de la capital lucense, donde el PP perdió tres concejales con respecto a 2011, Barreiro apunta a «factores internos que se deberán ver», así como a otros «xerais, porque en todos os sitios onde hai un compoñente urbán houbo baixadas de votos».
En todo caso, recuerda que el PP fue la fuerza más votada en la ciudad, «e se o PSOE di que quere gobernar, nós tamén aspiramos a facelo», comentó el portavoz popular en el Senado, que considera que Jaime Castiñeira puede garantizar la gobernabilidad de la ciudad. Sin embargo, Barreiro cree que la actitud del actual alcalde de mantenerse como candidato a la alcaldía, pese a que Lugonovo y BNG no le apoyan, puede deberse a una «posta en escena» y por ello no sabe «ata que punto Orozco dirá que se vai sacrificar» para que gobierne el PSOE.
El dirigente popular comentó además que a los socialistas se les han vuelto en su contra las alusiones que durante la precampaña hacían a la polémica surgida en el PP en torno a la designación de la candidata a la Diputación, «porque agora eles teñen tres aspirantes e Besteiro tivo que tocar a rebato». En todo caso, defiende que los populares están «lexitimados» para liderar el ente provincial, porque son el partido más votado y mantuvieron los 11 diputados, unos resultados que contrapuso a los del resto de provincias gallegas, donde el PP perdió cinco escaños en Pontevedra, cuatro en A Coruña y uno en Ourense.
Barreiro también opinó sobre el liderazgo de Mariano Rajoy en el partido tras los resultados de los comicios para asegurar que sigue intacto e que «non está cuestionado». A la vez, recordó que el presidente del PP ya anunció que se harán cambios para tratar de favorecer la participación en el partido y mejorar la comunicación.
CASTIÑEIRA. El candidato popular a la alcaldía de Lugo también continuó por su parte los contactos con el resto de fuerzas que lograron representación en el Concello de Lugo y ayer le tocó el turno a Lugonovo y Ciudadanos, mientras que el BNG declinó reunirse. Jaime Castiñeira calificó de cordiales los contactos y mientras dijo compartir muchos puntos del programa de Lugonovo, aclaró que los ediles electos de Ciudadanos le plantearon que asumiese un documento con puntos que cree «teñen que ser pactados a nivel nacional».
José Manuel Barreiro Presidente del PP Lugo Hai que facer autocrítica. Temos que analizar o que pasou en cada concello e iso implica unha reflexión»
