Dinamita para el perímetro en ataque. Capacidad de sacrificio en defensa. Son las notas que definen el juego del escolta montenegrino Nikola Rakocevic. El jugador llega al Cafés Candelas Breogán después de haber destacado en el Valladolid la temporada pasada. Al lado del Pisuerga compartió equipo con Federico Uclés, ahora también breoganista, y ambos llegan a Lugo ilusionados y con la confianza de formar parte de una entidad, y una ciudad, en la que el baloncesto se respira profundamente.
«Estoy encantado de venir a Lugo», reconoce el montenegrino. «Viví lo que es esta afición el año pasado con la camiseta del Valladolid y me pareció increíble el ambientazo que había. Espero que este año haya el mismo o más», señala Nikola Rakocevic, que recuerda muy bien los cuatro partidos de semifinales por el ascenso a la ACB que afrontó ante el equipo de Lisardo Gómez.
«Los cuatro partidos que el año pasado jugamos contra el Breogán fueron muy complicados», rememora. «El primero lo ganaron ellos fácilmente. En el segundo perdíamos por 12 puntos a falta de un minuto medio y logramos una remontada histórica... nos sorprendimos a nosotros mismos» dice. «Ese triunfo nos sirvió para motivarnos para los siguientes partidos, pero en Valladolid perdimos de nuevo y ya el cuarto era una tarea prácticamente imposible», asegura Rakocevic, que promedió cerca de 10 puntos por partido en esa serie.
Rakocevic, optimista por naturaleza, se ha encontrado muy cómodo con sus nuevos compañeros en las primeras tomas de contacto. Ya conocía a algunos, por lo que la adaptación (habla un castellano perfecto) no va a suponer ningún problema. «Estoy muy contento con cómo van los entrenamientos y también con mis compañeros. Ya conocía a algunos de ellos. A Uclés de compartir equipo, a Llorente desde hace años, con Álex López también había coincidido ya. Todo muy bien, la verdad», comenta. El montenegrino está entusiasmado con su nuevo equipo y desprende buena sintonía sobre el parqué. No olvida el objetivo principal del club y para qué ha venido a Lugo.
«La ambición del equipo es aspirar a lo máximo», indica. «Para mí, tiene buena pinta y aunque va a ser difícil repetir lo del año pasado, vamos a luchar y a ver qué pasa», añade. Nikola Rakocevic viene a aportar no solo lanzamiento exterior. «He mejorado muchas cosas en mi paso por Valladolid. El bote, la penetración a canasta... creo que este año se va a ver un Niko más completo, y no solo lanzamiento exterior», asegura un positivo Rakocevic, que se despide de esta manera: «Siempre hay que ser optimista y pensar que todo va a salir bien».
LLEGÓ SAMB. El pívot Mamadou Samb se incorporó ayer a los entrenamientos del Cafés Candelas Breogán, donde cumplirá su segunda temporada. El jugador pasó el correspondiente reconocimiento médico y se puso de inmediato a las órdenes de Lisardo Gómez, técnico del equipo lucense.
Los técnicos y la plantilla breoganista se desplazan hoy a Ribadeo para efectuar una primera concentración. El Breogán jugará el viernes (20.00 horas) en dicha localidad y ante el Coruña su primer amistoso.
El dato A Ribadeo El Breogán se concentra desde hoy en Ribadeo, donde el viernes jugará un amistoso
