Un grupo de habitantes de la parroquia de Ombreiro, en el municipio de Lugo, se han movilizado para evitar la ejecución este martes de una orden de demolición de una vivienda por parte de la Agencia por la Protección de la Legalidad Urbanística (Aplu), dictada tras la resolución de un expediente de reposición.
En declaraciones a Efe, uno de los copropietarios de la vivienda, David López Núñez -la casa también es de su hermana Dolores María-, explicó que el expediente de reposición de legalidad fue tramitado de acuerdo con las normas urbanísticas del anterior plan general, de 1991, porque está en "suelo rústico de protección ordinaria".
Precisó que en el nuevo plan urbanístico general de Lugo, el 5% del proyecto todavía pendiente de aprobación, figura la calificación de la finca en la que está emplazada esa casa, que cambia, de modo que sería "perfectamente legalizable".
En cualquier caso, López Núñez indicó que la Policía Autonómica le comunicó la semana pasada que mañana, 17 de noviembre, está prevista la entrada en la propiedad, algo que los dueños no están dispuestos a permitir, dado que han interpuesto recurso contra la resolución de ese expediente e incluso una "querella criminal" contra la Aplu, dependiente de la Xunta.
Ambos recursos legales se basan, explicó el propietario, en que el expediente fue tramitado a nombre de su madre, que nunca fue dueña de esa vivienda, dado que era "un bien privativo" de su padre, heredado, a su vez, "de su abuelo".
Al fallecer su padre en 2006, fueron los dos hermanos los que heredaron la propiedad, los que pagaron los impuestos de sucesión y los que continuaron tributando cada año el impuesto de bienes inmuebles al Ayuntamiento, sin que la Administración les comunicase la tramitación del citado expediente.
Por ello, López Núñez insistió en que tanto él como su hermana, como propietarios de la vivienda objeto de ese expediente, deberían haber recibido las correspondientes notificaciones administrativas, pero nunca llegaron porque fue tramitado a nombre de una persona, su madre, que no era la dueña de la casa.
El propietario subrayó que por ello mañana se van a oponer a esa demolición y aseguró que cuentan con el respaldo de los vecinos.
"Todo el pueblo está a nuestro favor, porque ven que es una injusticia lo que está pasando", comentó,
Por otra parte, varios vecinos de Ombreiro confirmaron que mañana acudirán a respaldar a esa familia y a evitar el derribo, algunos incluso "con tractores y excavadoras" para bloquear el acceso de maquinaria pesada a la finca.
