Serena Williams está abatida tras la muerte de su mascota, Jackie, una perrita que desembarcó en la vida de la deportista hace 17 años. Quince días después de la llegada de Jackie, la pequeña de los Williams se alzaba con su primer Grand Slam.
La estadonidense ha querido rendir tributo al animal a través de Twitter, Instagram y Snapchat con mensajes en los que recuerda a su mascota y le promete no olvidarla.
La tenista relata que "Jackie estaba bien hasta hace unos días, cuando ha empeorado". "Esta mañana me ha hecho entender que debía ser valiente y dejarla ir", explica, llorando en un vídeo. "La echo tanto de menos. Salí de la ducha esta tarde y no estaba para lamerme las piernas, como siempre, para recordarme cuánto me amaba", termina.