El PSOE contrata a tres miembros del BNG para trabajar como asesores para la Diputación de Lugo

El área de presidencia de la Diputación Provincial de Lugo, gestionada por el PSOE, ha contratado como asesores a tres personas vinculadas al BNG. Con esta operación, los socialistas pretenden compensar la merma de personal que el Partido Popular y Manuel Martínez impusieron a los nacionalistas cuando les recortaron, mediante una enmienda en el pleno, la asignación para salarios y asesores.

El Boletín Oficial de la Provincia publica este sábado el nombramiento de Esther López Rodríguez y Lucía López Sobrado como asesoras de nivel IV, y de Diego Elías García Puente como administrativo de apoyo. Estas tres personas están vinculadas al BNG y ya trabajaban para la corporación provincial dentro de las áreas nacionalistas en el pasado mandato.

Esther López es responsable comarcal del BNG en Lugo y fue suplente en la lista nacionalista de A Pastoriza en las últimas elecciones municipales. Lucía López ocupó el número 8 de la candidatura de Sarria y Diego Elías García fue número 2 en Cospeito. Las dos primeras forman parte de la ejecutiva del BNG de Lugo y el tercero es miembro del consello comarcal.

La publicación de su nombramiento en el BOP confirma los rumores que en los últimos días apuntaban a que el PSOE intentaría paliar la falta de personal del BNG cediendo algunos de sus sueldos de asesores a los nacionalistas.

Tras la moción de censura que apartó al PP del gobierno, socialistas y nacionalistas presentaron una propuesta de organización que contemplaba nueve asesores para el BNG, pero los populares, mediante una enmienda apoyada por el diputado Manuel Martínez, los redujeron a dos y de la categoría más baja. Le restaron también un asesor al PSOE, en este caso de nivel I, el de mayor salario. Era el puesto que en los últimos años ocupó Luis Ángel Lago Lage, presidente de la gestora del PSOE en Lugo. Además, rebajaron a la mitad el sueldo del diputado del BNG Xosé Ferreiro, que finalmente renunció a él y retomó su trabajo.

El BNG, tras esta operación, quedó en precario para desempeñar su labor de gobierno. Contaba con el vicepresidente Antonio Veiga con dedicación exclusiva, el diputado Xosé Ferreiro sin dedicación a la Diputación y la posibilidad de contratar únicamente dos auxiliares.

No obstante, los nacionalistas no renunciaron a las áreas de gobierno que les habían correspondido: cooperación con los concellos, deportes, cultura y Centro de Artesanía e Deseño. En aquel momento indicaron que los funcionarios de la Diputación eran suficientes y competentes para realizar el trabajo de sus áreas y que contaban con su colaboración para los próximos cuatro años.

Los nombramientos que hoy se hacen públicos revelan un nuevo movimiento del bipartito para saltar los límites marcados por el PP con apoyo de Manuel Martínez en el pleno de organización del pasado 4 de noviembre, aunque oficialmente los tres trabajadores del BNG han sido contratados para prestar servicio en el área de presidencia, dependiente del PSOE.