El espectáculo del río Sil en Montefurado

El túnel romano se colapsa y el río recupera su viejo cauce anegando las tierras que secaron los romanos en el siglo II para coger oro

En el siglo II de nuestra era el emperador Trajano ordenó agujerear la montaña Pena do Corvo en la parroquia quiroguesa de Montefurado. El plan era desviar el cauce del río Sil unos tres kilómetros para secar un trozo del viejo trayecto del río y sacar oro de los lodos del fondo. En la actualidad, cuando llueve mucho y el Sil crece, el túnel se va llenando hasta colapsarse y el río vuelve a su viejo recorrido, el que tenía antes de que se hiciese el túnel.

Ese espectáculo es el que se puede ver este sábado en Montefurado. El túnel tiene 120 metros de largo, 19 de ancho y 17 de alto pero se queda pequeño para asumir el gran caudal del Sil. El conducto no asume toda el agua que le llega y la que no logra entrar en el túnel sigue hacia la izquierda, por el viejo trayecto, inundando huertas y cubriendo parte de las torretas de las líneas eléctricas. Las carreteras que dan acceso a la entrada y salida del túnel también están cortadas.

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