Los equipos que participaban en la búsqueda del niño de veinte meses arrastrado por el mar en la playa de Frejulfe, en Navia, han concluido a las 16:30 horas de este domingo sus tareas, dificultadas por el temporal que afecta al litoral cantábrico, lo que pone fin a una semana de rastreos sin éxito.
Tras la jornada de ayer, en la que la bajamar y la mejora de las condiciones meteorológicas permitió ampliar el radio de búsqueda hasta la playa de Xagó, en Gozón, y elevar a 73 el número de personas que colaboraban al contar con voluntarios de Protección Civil, el dispositivo se ha reducido hoy a 29 integrantes, cifra similar a la que se movilizará la jornada de mañana.
Los servicios de emergencias, bomberos, miembros de Cruz Roja y Guardia Civil han centrado hoy sus labores en el tramo de costa entre Navia y Cabo Vidio, en Cudillero, y se han limitado a explorar los arenales dado que las condiciones meteorológicas no permitían hacerlo en las zonas de acantilados, según fuentes del dispositivo.
A primera hora de la mañana el helicóptero Helimer 207, de Salvamento Marítimo, pudo salir para incorporarse a la búsqueda aunque poco después tuvo que regresar a su base en Gijón ante las fuertes rachas de viento que afectan a la costa asturiana.
El litoral del Principado se encuentra en alerta naranja ante fenómenos costeros con olas de hasta siete metros combinados con vientos que podrían alcanzar los cien kilómetros por hora.
El suceso ocurrió el pasado lunes en la playa de Frejulfe, a pocos kilómetros de la residencia familiar, a donde el pequeño había acudido con su padre y su abuelo a contemplar el temporal, al igual que otros vecinos de la zona, justo cuando la marea estaba más alta y había alerta naranja por olas de hasta ocho metros.
Un golpe de mar les sorprendió cuando trataban de pasar por una zona en la que la playa se estrecha a causa de un entrante de rocas, a pesar de las advertencias de algunos vecinos que también se encontraban en la playa contemplando el mar.
La ola tiró al suelo al padre y al abuelo, que llevaba en brazos al pequeño, y les arrastró mar adentro, momento en el que perdieron al niño mientras que los adultos lograron salir del agua.
