El cadáver que fue encontrado a las orillas del río Cabe en el Paseo do Malecón de Monforte en la noche del domingo pertenece a M.R.N., un vecino del cercano barrio de A Pena, que tenía 58 años. La Policía descarta cualquier acción violenta de terceras personas y da por seguro que se quitó la vida en uno de los árboles del paseo a consecuencia de una fuerte crisis que padecía por una grave enfermedad.
La Policía confirmó que recibió una llamada telefónica que alertaba de la existencia de una persona suspendida de un árbol. Al llegar la patrulla se rescató a la persona y se comprobó que estaba muerta. Así lo atestiguó también personal del 061. Posteriormente se alertó a los servicios judiciales y el forense certificó la muerte a consecuencia de la autolesión, que le provocó la asfixia y heridas en el cuello.
CONSTERNACIÓN. El suceso, del cual informó este diario, causó gran consternación al ser un monfortino muy conocido. Era viudo y solía trabajar al jornal, sobre todo como albañil. Deja una hija y tres nietas.
Personas que lo conocían dijeron que hacía tiempo que no lo veían por la calle. Tanto ellos como sus vecinos lamentaron el incidente y sobre todo que cometiese el acto en un lugar público. «Menos mal que alguien lo vio y casi estuvieron a punto de poder salvarlo, pero peor sería que quedase allí toda la noche y lo viese más gente», dijo un residente en la zona.
