El hijo del desaparecido en Chantada no descarta que volviese a Venezuela

"Solo nos podemos agarrar a la esperanza o a pistas que aparecen desde Lalín". Así se pronuncia José Carlos Torre, hijo de Ernesto Torre, el chantadino, de 77 años, que después de comer con la familia hace más de una semana dijo que se iba a casa y a dar una vuelta, pero, hasta el momento, no ha regresado. Sus personas más cercanas no quieren perder la esperanza y no descartan que haya podido regresar a Venezuela, de donde volvió hace poco más de un año.

Al no volver al anochecer del día de su desaparición, empezaron a preocuparse la familia y los vecinos más cercanos y se inició entonces la búsqueda más intensa. Se revisó el entorno y debajo de un cerezo apareció un jersey y una bandolera que llevaba cuando iba de paseo, así como un paraguas a unos metros.

En el bolso no aparecieron ni su teléfono, ni las llaves de casa, ni la cartera, que se encontraban en su domicilio ¿Con qué intención? "No se puede saber por qué lo hizo. Mucha gente sale de casa sin nada para desconectar totalmente o simplemente para no llevar ningún peso. ¿Quién puede decir dónde está pasados ya diez días?", cuestiona su hijo José Carlos.

La familia de Ernesto Torre recibió cuatro llamadas que lo situaban en la zona de Lalín, "de compras, en varios supermercados", pero las grabaciones de las cámaras no permitieron identificarlo.

La idea de familia Torre es seguir con la búsqueda de su padre en la zona de Lalín, porque es de donde reciben llamadas, "pero lo hacemos sobre todo para descartar que sea nuestro padre. Creemos que la gente lo confunde con una persona parecida, pero no hay que descartar nada. Por eso, estamos buscando por la zona", dice su hijo.

"Tras la inspecciones de los buzos, o está muy en el fondo enganchado en una zona del río inaccesible, o no está ahí. Por eso creemos que hay también la posibilidad de que regresase a Venezuela, de donde vino hace un año", señala.