La patrona de Vilalba, Santa María, luce desde este domingo una nueva y valiosa corona, donada por un vilalbés ilustre, el cardenal Antonio María Rouco Varela, que también presidió la misa celebrada en la iglesia de Santa María en la que se procedió a la coronación canónica de la imagen de la Virgen María, en la liturgia de la Eucaristía.
Miembros de la corporación municipal, numerosos vecinos y una docena de sacerdotes, entre ellos el obispo de Lugo, el vilalbés Alfonso Carrasco Rouco, asistieron a la ceremonia religiosa, cantada por la coral Polifónica Vilalbesa, que dirige el párroco Uxío García.
Rouco Varela destacó el tamaño y la belleza de la imagen de la Virgen María, que se bajó de su lugar habitual en el altar mayor, y avaló la "necesidad" de coronarla, siguiendo una tradición del siglo XIX, por "todos los bienes" que a ella se le deben, empezando por "la fe en su hijo". Y es que el cardenal vilalbés aprovechó para elogiar la figura de las madres, personificadas en la virgen, y recordar la relevancia que tiene Santa María en la capital chairega, de aí este "acto de reconocimiento alentado por la fe, el amor y la devoción a ella".