El Breogán hará frente entre el martes y el miércoles a los pagos pendientes a la plantilla de la pasada temporada, con lo que la entidad lucense, si no surgen inconvenientes de última hora, evitará la ejecución del aval depositado en la FEB, ya que el plazo para estar libre de deudas con los jugadores finaliza con el mes de junio.
En los últimos días de la pasada semana una entidad bancaria dio el visto bueno a la petición de un préstamo solicitado por el club lucense de 180.000 euros. Después de la firma notarial, en el día de ayer solo quedaba la firma de la nóminas pendientes para que estas se pudieran hacer efectivas.
Aunque desde el Breogán se mantiene el absoluto silencio desde el final de la competición, el hecho de evitar la ejecución del aval puede facilitar la renovación del mismo -aunque hay que realizar los trámites precisos ante la entidad bancaria que lo respalde- y por lo tanto facilitar la inscripción del equipo de cara a la próxima temporada.
En este sentido, en la pasada semana la comisión gestora de la FEB aprobó las bases de competición que regirán en la temporada 2016-17, de la que ya se conocía un borrador. Hay algunas variaciones, como la fecha tope de inscripción que ha pasado de ser el día 6 de julio al día 12 de julio a las 13:00 horas. Los clubes que lo deseen pueden ya pueden hacer la inscripción sin esperar a esa fecha.
Aunque las bases aprobadas aun tienen que ser refrendadas por la asamblea de la FEB, llama la atención que no se han atendido algunas de las peticiones de los clubes, como que la Copa Princesa la sigan disputando los dos primeros clasificados al final de la primera vuelta - los clubes solicitaban que fuera cuatro los participantes-. Tampoco se modificó el precio de las licencias para los jugadores extracomunitarios, que sigue siendo de 3.000 euros, ni se rebajó la cuota de inscripción.
Además, en las citadas bases, en el apartado 2.3 que hace referencia al ascenso de categoría se mantiene para el campeón de la fase regular y para el vencedor del play off final, aunque se matiza que se deja en suspenso la redacción definitiva de este apartado «por acuerdo de la comisión gestora y a petición del Consejo Superior de Deportes».
Si el Breogán finalmente se inscribe en tiempo y forma, como cabe esperar, el siguiente frente abierto estará en la planificación de la próxima temporada. El consejo de administración todavía no ha convocado la junta general extraordinaria de accionistas -hay que hacerlo con treinta días de antelación a su celebración-, en la que previsiblemente se produciría el cambio de dirigentes. Parece difícil que se pueda realizar la junta durante el mes de agosto por lo que, teniendo en cuenta que a finales de ese mes el equipo tendría que empezar la pretemporada, quedan dos opciones.
La primera es que el proyecto de la próxima temporada, a nivel económico y deportivo, lo asuma el actual consejo de administración. La otra posibilidad sería que representantes del que podría ser el nuevo consejo de administración se incorporaran ya al actual por el procedimiento de cooptación y que tomaran el control de la entidad. En este caso, el único requisito es que los nuevos miembros tendrían que ser ratificados en la primera junta de accionistas que se celebrara. Pero para ello, haría falta un entendimiento inexistente en estos momentos.
