La gestión hospitalaria es una clave más en el éxito del modelo de negocio de iDental

Los centros hospitalarios se erigen como edificios dedicados a servicios sanitarios con una función social clara. Desarrollan una gestión que precisa de la identificación de las necesidades de los pacientes, adaptándose a la evolución y el ritmo que demanda la sociedad.

Por otra parte, la subida de los costes en el sector sanitario ha llevado a dirigentes de empresas y clínicas privadas a crear diversos planes para la reducción de precios, siempre manteniendo un nivel óptimo de calidad en sus servicios. En iDental se planteó la administración de sus centros basándose en un modelo de gestión hospitalaria. Esta estrategia les ha permitido ganar en eficiencia, ajustar los costes y los márgenes sin comprometer la calidad de sus tratamientos. De hecho, las clínicas cuentan con los últimos avances en materia de tratamientos dentales, contando con los proveedores de materiales y recursos de referencia en el sector.

En un hospital podemos encontrar diversos departamentos o servicios que se relacionan entre ellos y que les permiten controlar la cadena de valor. Para que esta estrategia sea del todo efectiva, precisa de centros de gran tamaño. iDental se nutre de este modelo y establece clínicas cuyo tamaño comprende desde los 2.000 hasta los 10.000 metros cuadrados. De hecho, cuentan con el centro odontológico más grande del mundo en Rivas Vaciamadrid (Madrid), con una superficie de 11.000 metros cuadrados. Al contrario que una clínica dental individual, que suele tener 3 ó 4 gabinetes en su espacio, cada centro de iDental cuenta, de media, con 25 boxes de atención. Esta gestión les permite absorber el crecimiento previsto, ya que el tamaño de los centros garantiza la asistencia a sus pacientes y además les proporciona una ventaja competitiva respecto al resto.

En la línea de la gestión hospitalaria, iDental cuenta con un holding de empresas asociadas, que mediante la formación, obras, mantenimiento o incluso la gastronomía y los servicios, ha creado un modelo de concentración que le permite controlar todo el proceso y tener unos costes agrupados. Este conglomerado de empresas con funciones diversas y roles definidos, permiten en su conjunto satisfacer los requerimientos y demandas de los pacientes. Otorga la capacidad a los profesionales de controlar todo el tratamiento, desde la revisión y diagnóstico, hasta los últimos cuidados que completan el recorrido del paciente por la clínica.