Gallegos y asturianos crean una ruta de 200 kilómetros por el Navia

El grupo promotor, que representa a colectivos e instituciones de 16 concellos, se reúne este sábado en A Fonsagrada para fijar un plan de trabajo
El río Navia a su paso por A Fornaza, en A Fonsagrada
photo_camera El río Navia a su paso por A Fornaza, en A Fonsagrada

Colectivos e instituciones de 16 concellos limítrofes entre Galicia y Asturias se han unido en un proyecto común: crear una ruta de senderismo y cicloturismo a orillas del Navia que sirva de dinamizador económico y demográfico para las comarcas que el río atraviesa, desde su nacimiento en Pedrafita do Cebreiro hasta su desembocadura en el mar Cantábrico.

La ruta, que sus promotores han denominado gran senda del Navia, tendrá como mínimo 143 kilómetros de recorrido, que es lo que mide el cauce del río, aunque el trazado final se estima que superará los 200.

La intención es aprovechar los caminos tradicionales existentes, primar la cercanía al río y recurrir a los tramos de carretera lo mínimo posible. El trazado enlazará con elementos de valor patrimonial, natural, arquitectónico o etnográfico, de modo que sirva de dinamizador turístico y económico de las riberas del Navia.


Cada ayuntamiento podrá elaborar un proyecto para aprovechar su potencial turístico y favorecer la creación de negocios locales


La iniciativa partió de la Sociedad de Amigos de Boal, en Asturias, y pronto se contagió a otros colectivos de senderismo y escalada tanto lucenses como asturianos. El proyecto fue bien recibido en los 16 concellos por los que pasa el río (siete lucenses), por lo que sus promotores se han puesto manos a la obra para concretar el trazado de la senda y elaborar un proyecto para presentar a la Xunta de Galicia, al Gobierno de Asturias y al Ministerio de Medio Ambiente, con la intención de conseguir fondos para acondicionar la ruta. La Diputación Provincial de Lugo ya les ha mostrado su apoyo.

El grupo promotor celebrará este sábado en A Fonsagrada una reunión de trabajo. Su intención es impulsar la creación de grupos de trabajo locales y distribuir funciones entre sus integrantes.

Para concretar el trazado de la senda, los colectivos de cada concello deberán definir su parte, estudiar las necesidades de acondicionamiento y los elementos patrimoniales que se pueden vincular. Además, cada ayuntamiento podrá elaborar un proyecto de desarrollo local alrededor de la ruta, para aprovechar su potencial turístico y favorecer la creación de negocios locales para prestar servicio a quienes la recorran.

Miguel Mojardín, de la Sociedad de Amigos de Boal, confía en que la población de los 16 municipios que atraviesa el Navia, unas 33.000 personas, se implique en esta iniciativa, "que no sale de un gabinete de ingenieros, sino de la población", consciente de "la necesidad de proyectos capaces de generar nuevas actividades económicas y empleo".

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