Caballero obvia las declaraciones de Mouriño

El presidente del Celta amenaza con llevarse al club de la ciudad si el Concello no le ofrece la venta de Balaídos o la cesión de terrenos para una ciudad deportiva
El alcalde de Vigo y presidente de la FEMP, Abel Caballero
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El alcalde de Vigo, Abel Caballero, ha evitado valorar las palabras del presidente del Celta, Carlos Mouriño, quien este lunes se ha ratificado en que se llevará el club de la ciudad si la corporación municipal no le vende el estadio de Balaídos o le cede unos terrenos para construir uno nuevo.

Como ya ha sucedido en anteriores ocasiones, Caballero ha guardado silencio sobre las reivindicaciones públicas de Mouriño, a quien únicamente replicó la primera vez que se ofreció a comprar Balaídos, insistiendo en que el estadio es de propiedad municipal y así lo seguirá siendo.

Mientras, la portavoz del PP de Vigo, Elena Muñoz, ha insistido en la propuesta que personalmente le trasladaron a Mouriño, la de una concesión administrativa del estadio a 50-60 años, y como contrapartida, la inversión del club en la construcción de una ciudad del deporte.

Muñoz ha reclamado un "debate público" sobre esta cuestión y ha hecho hincapié en que "hay que hacer lo posible" para garantizar el "arraigo" del club en la ciudad, y en que resulta "impensable" para los vigueses que se pudiera acabar trasladando.

Carlos Mouriño ha desvelado este lunes que rechazó una oferta de 93 millones de euros por el 66 por ciento del accionariado.

"El 23 de febrero solicitamos al ayuntamiento la compra del estadio de Balaídos o una licencia para construir un campo nuevo. Estamos esperando su respuesta. A partir de esa respuesta tomaremos las decisiones necesarias", comentó el máximo accionista del club en un desayuno informativo con la prensa.

"Si no nos quieren en Vigo, nos tendremos que ir de Vigo. Nosotros estamos escuchando muchísimo la palabra legalidad. ¿Pero qué pidió el Celta que fuera ilegal? Nada", agregó.

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