"Ofensa", "cazoleo", "insulto". Son algunos de los calificativos que el BNG lucense dedica a la propuesta del gobierno local de eximir a la Xunta de pagar el Ibi del hospital y otros centros sanitarios durante seis años (3,6 millones de euros) a cambio de que la administración autonómica dedique esa cantidad a equipar el nuevo auditorio. Pero, paradójicamente, un acuerdo similar es el que acaba de aceptar el alcalde insignia del Bloque, el pontevedrés Miguel Anxo Fernández Lores: la Administración autonómica acaba de comprometerse a ampliar el hospital de Montecelo y, en contrapartida, el Concello de Pontevedra no cobrará el Ibi del centro sanitario.
Sin embargo, el BNG lucense es muy crítico con la propuesta de la alcaldesa, Lara Méndez. Para el BNG, no es comprensible que el PSOE renuncie a una inversión que tiene que hacer la Xunta, afirma Arroxo. "A perda dos ingresos do Ibi destes edificios suporá un enorme prexuízo para Lugo e poñerá en risco moitos investimentos por unha cantidade que non debería ter este tipo de contraprestacións", señala.
Por otro lado, el BNG cree que esta propuesta sienta un precedente para las inversiones que la Xunta tiene pendiente en Lugo, como el remate del plan Paradai, el cuartel de San Fernando o A Tinería. "Podería darse o caso de que a Xunta chantaxeara ao Concello con estas propostas", dice.
La propuesta de Méndez suscita rechazo de toda la oposición. Incluso el grupo municipal del PP la ve "nefasta" porque perjudica a las arcas municipales.
