El Rubián es sancionado con dos encuentros a puerta cerrada

Jugará sin público lo que resta de su encuentro ante el Sober y el duelo completo con el Oural

El CD Rubián tendrá que jugar a puerta cerrada sus dos próximos partidos como local debido a la sanción que le ha impuesto la federación por los insultos racistas proferidos por un aficionado contra el árbitro de origen argelino Sadoum Bahia Saghair durante el encuentro del pasado fin de semana contra el Sober, suspendido por el propio colegiado alrededor del minuto 75.

Los aproximadamente 15 minutos que restan de este choque se jugarán este viernes en O Poste, a partir de las 20.30. No habrá público en la grada, como tampoco en el duelo del domingo frente al Oural, a las 17.00 horas. El árbitro del partido entre el Rubián y el Sober, perteneciente al grupo VII de Segunda Autonómica, reflejó en el acta los insultos "moro de mierda" y "negro de mierda", así como las frases "me cago en tu puta madre, cuando te vea fuera te voy a matar" y "da vergüenza que un tío como tú tenga acento gallego para ser de fuera". Ante las amenazas e injurias, el colegiado suspendió el encuentro después de que el delegado del Rubián se acercase al hincha autor de los improperios para pedirle que cesase en sus actos primero y expulsarle de las instalaciones, después. Una vez había salido del campo, el hombre regresó a la grada y entonces el trencilla suspendió la contienda.

Rubián-Sober: Según el acta del choque, un aficionado profirió insultos racistas contra el colegiado

Varios presentes aseguran que el árbitro, de unos 20 años de edad, estaba muy nervioso por lo ocurrido. La situación se agravó a partir de su decisión de expulsar a un futbolista local sobre el minuto 70 de encuentro. En ese momento, el infractor bajó desde la grada hasta la barandilla del terreno de juego.

Desde el Rubián lamentan y condenan profundamente los insultos proferidos por este aficionado, que todavía no ha sido identificado, pues ya había abandonado el campo de O Poste cuando llegó la Guardia Civil ante las llamadas del club. Fuentes consultadas por este diario señalan que podría tratarse de un vecino de Monforte vinculado familiarmente a uno de los jugadores de la entidad.

El Rubián, además de condenar los hechos, se prestó a colaborar con la federación para intentar localizar al autor de las injurias e intentar evitar estos acontecimientos en el futuro. A pesar de ello, el organismo que coordina el fútbol gallego ha decidido emitir la mencionada sanción de dos partidos a puerta cerrada como local, que el club cumplirá este fin de semana.

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