Barata califica de "durillo" y de "necesario" el Medio Maratón Cidade de Lugo

Un milagro en Friol

La localidad lucense vive un boom del atletismo a nivel escolar desde la llegada hace cinco años del profesor y entrenador Felipe Barata. Los éxitos han llegado incluso a nivel nacional
Atletas friolenses junto a Felipe Barata
photo_camera Atletas friolenses junto a Felipe Barata

Toda revolución necesita un líder. Los hay bajo grandes focos iluminando el camino de los héroes. Pero también surgen en pequeños lugares, donde un cambio significa un impulso para crecer y creer en que el triunfo pertenece a cualquiera que viva el deporte con felicidad, ilusión y trabajo. El profesor lucense Felipe Barata se autocalifica como un friki del atletismo. Su naturaleza modesta le impide alzar su estandarte de guía de un grupo de chavales que mejoran cada día en Friol. Sin embargo, los resultados están ahí. No solo en la línea de meta, sino en que haya más atletas a partir de sus enseñanzas en el CPI Dr. López Suárez de la localidad.

"Hay clases mías que de quince niños hacen atletismo doce y eso es, en términos porcentuales, una barbaridad. La presencia de un profesor para adherirlos a la actividad física o un deporte es muy grande", relata Barata, quien ha probado las mieles del éxito con el equipo cadete femenino del Friol, que fue séptimo en el Nacional de cross de Marina d'Or.

"Viendo que es un pueblo tan pequeño y que se juntase ese grupo tan bueno a base de trabajo y de ilusión para estar ahí arriba tiene que llenar de orgullo a los propios chicos y al pueblo. Dos niñas quedaron bronce con Galicia en el Nacional de cross y Noelia Sánchez es la única atleta, masculina o femenina, que estuvo en la selección gallega de cross y de marcha. Creo que puede tener una buena proyección con sus trece años", asegura.

Barata no quiere abandonar Friol. Prefiere ver cómo los chicos de ahora se convierten en atletas maduros con el tiempo. "Supongo que me daría mucha pena irme de Friol. Este es un proyecto en el que los chicos todavía pueden crecer dos o tres años más conmigo. Es bonito ver cómo se va construyendo un proyecto como el de Friol. En la Ribeira Sacra —estuvo destinado en Monforte diez años— yo llegué a ser muy conocido. Llegué a Friol y era un don nadie y esa bofetada para el ego es maravillosa, porque al final no somos nada. Empezar de cero con los chavales y ver cómo van creciendo es muy bonito", apunta.

Quizás en ese grupo que entrena casi a diario esté la próxima Saleta Fernández, la actual subcampeona de España de altura en pista cubierta, que fue descubierta por Felipe Barata cuando mostraba su sabiduría en las pistas monfortinas. "Hay atletas que sabes que van a llegar porque les ves algo especial, denotan algo especial y eso Saleta lo tenía. Tenía algo en la mirada, ese genio competitivo que tienen que tener y que los hacen diferentes a los demás", valora Barata, quien no lloró la marcha de Saleta al CAR de Santander para trabajar con Ramón Torralbo y Ruth Beitia. "Cada uno tiene que saber hasta dónde puede llegar y si quieres al chaval tienes que dejarlo con gente que sepa. Ramón Torralbo es una institución de este deporte y Saleta (Fernández) no puede estar con nadie mejor que con él".

Comentarios