Más de 300 personas arropan a las plantillas del balneario e Ingemarga

Los vecinos de Guitiriz se echaron a la calle con los empleados de ambas empresas, en huelga y en concurso de acreedores, en una manifestación de la CIG para pedir «traballo digno»
Manifestantes recorriendo la Nacional VI hacia el Campo da Feira
photo_camera Manifestantes recorriendo la Nacional VI hacia el Campo da Feira

 La difícil situación que atraviesan dos empresas «emblemáticas» del municipio de Guitiriz preocupa no solo a sus trabajadores sino también a los vecinos en general. Este hecho quedó patente en la manifestación convocada el sábado por la CIG en defensa de los puestos de trabajo del balneario e Ingemarga, en la que las plantillas de ambas empresas contaron con el apoyo de más de 300 personas.

Así, una marea humana partió del entorno del Ceip Lagostelle para recorrer la Nacional VI hasta el Campo da Feira, donde dos trabajadores, uno de cada firma, leyeron un manifiesto bajo el lema ‘'Guitiriz quere futuro'’.

«Dúas empresas emblemáticas están a atravesar graves dificultades económicas que fan temer polo seu futuro e supoñen un importante motivo de preocupación para todos, que vemos como o emprego no concello esmorece», rezaba el escrito, en el que también se recordaba que 200 familias «dependen directamente» de estas dos entidades que, de desaparecer, «deixarían a economía de Guitiriz moi afectada e cun escenario desolador que vai crear serias dificultades na vida das persoas e supoñer o peche de negocios e a posterior perda de servizos».

En el caso del balneario, cuyos empleados portaban una pancarta con el lema ‘'Cobrar é un dereito e non un privilexio'’, la plantilla está en huelga indefinida desde hace más de un mes y los trabajadores acumulan tres nóminas y dos pagas extras sin cobrar a causa de unas «graves dificultades económicas derivadas en gran parte pola mala xestión, despois de saír dun concurso de acreedores».

Ingemarga por su parte, en concurso de acreedores desde principios de año, asume el pago de las nóminas «de xeito ordinario», según explicaron los afectados, bajo el contro del administrador concursal, pero la preocupación por los puestos de trabajo «crece día tras día ante a falta dun plan de viabilidade serio que asegure o futuro da empresa».

La protesta contó con la presencia de la alcaldesa, Regina Polín, representantes de la corporación municipal y el portavoz de En Marea, Luís Villares, que quiso estar en la localidad chairega para «defender aos traballadores de dúas empresas que son dous piares do concello» y que se encuentran en una situación en la que «a xente se está xogando moito».

Por el momento, la CIG y las plantillas no tienen previstas más movilizaciones y seguirán a la expectativa de posibles novedades.

Comentarios