El Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) condenó a la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestruturas a indemnizar con 12.000 euros a una familia de Chorente por daños y perjuicios que les causó las obras del primer tramo del corredor de Sarria a Monforte.
Los vecinos presentaron un recurso contra la desestimación por silencio administrativo de la Xunta ante una reclamación de responsabilidad patrimonial remitida en 2011 y pidieron una indemnización de 106.000 euros.
Los sarrianos alegaron que las obras les provocaron «graves daños» en su vivienda por la circulación diaria de camiones y maquinaria de obra, como la aparición de grietas interiores y exteriores.
Aseguraron también que les causaron inundaciones en una finca destinada a prado, la cual se encuentra «prácticamente incomunicada» porque deben acceder a través de un túnel. Este «solo permite el paso a pie pero no el tránsito de ganado, vehículos o maquinaria agrícola» por las «escasas dimensiones», afirmaron.
Argumentaron también que las obras ocasionaron «graves daños» a su explotación al no ser posible el pasto del ganado, lo que lleva a «una merma de la producción y pérdida de ayudas y subvenciones». Además, solicitaron indemnización por el incremento de los costes por el desplazamiento de maquinaria, la mano de obra, el manejo de ganado y los tratamientos veterinarios.
El TSXG señala que «se ha evidenciado una actividad perjudicial para los intereses de la parte demandante», pero discrepa sobre la cuantía de la indemnización y la establece en 12.000 euros.
Los daños en las fachada de la casa afirma que ya existían antes del inicio de las obras y en cuanto a las grietas interiores asegura que los trabajos pudieron generar la aparición de otras nuevas o la aceleración de algunas que ya había. Por ello, el tribunal valora la reparación de los desperfectos en el inmueble en 3.500 euros.
AUMENTO DE GASTOS. También falla que se debe indemnizar en 8.500 euros a los vecinos por el aumento de los costes en la explotación ganadera, correspondientes al incremento de gastos veterinarios, de manejo de ganado y del desplazamiento de maquinaria y otros vehículos. El tribunal establece esta cuantía teniendo en cuenta que la explotación finalizó la actividad a principios de 2014.
El TSXG rechaza compensar a la familia por los problemas en una finca y por la supuesta pérdida de subvenciones en la granja.
