Desempolvar la historia

Once jóvenes, de entre 18 y 25 años, participan estos días en el campo de trabajo Casa da Neveira de Lousada, en Xermade, donde realizan, bajo la tutela de arqueólogos y restauradores, labores de consolidación en un yacimiento medieval.

Once jóvenes, de entre 18 y 25 años, están viviendo una de las experiencias más enriquecedoras de su vida. Su participación en la tercera edición del campo de trabajo Casa da Neveira de Lousada, promovido por la dirección xeral de Xuventude e Voluntariado de la Xunta, con la colaboración del Concello xermadés, les está dando la posibilidad de desempolvar parte de la historia de esta localidad chairega.

Su trabajo diario, y que se prolongará hasta el sábado, se centra en un yacimiento medieval, que fue descubierto hace algunos años, y en el que los jóvenes, llegados desde distintos puntos de Galicia, además de Almería, Bilbao y Hong Kong, están descubriendo en primera persona en qué consiste el trabajo de arqueólogos y restauradores.

«Están facendo dúas tarefas. Por un lado, subindo manualmente ou con cordas as pedras que caeron das estruturas e, por outro, axudando a consolidar a cabeceira noroeste da neveira», explica el director del campo de trabajo, Israel Picón, de Acitania Arqueoloxía e Xestión do Patrimonio, satisfecho por el avance de los trabajos, pero sobre todo por la implicación de los jóvenes, que no tienen nada que ver con este mundo.

Pese a ello, cada mañana, desde que llegaron a Xermade, acuden a este emplazamiento lejos de sus hogares y de la civilización con una sonrisa. «Los primeros días eran un poco pesados, pero ahora ya nos vamos acostumbrando y la experiencia está siendo muy buena», explica una de las participantes, mientras los demás asienten.

Los participantes de esta tercera edición proceden de diferentes puntos de Galicia, además de Almería, Bilbao y Hong Kong

Estos jóvenes, que han tenido la fortuna de participar en la recuperación del pasado xermadés, están tutelados por un equipo de expertos en el que además de Israel Picón están Begoña Albertos, Óscar Arias y Aldara Rico. Esta última se encarga además de dirigir la parte de restauración.

«Estamos traballando nas zonas que necesitaban unha intervención máis inmediata. Na cabeceira noroeste realizamos unha pequena reconstrución e, no muro sur, damos sustento, xa que estaba bastante inestable e comezaba xa a desprazarse», explica Aldara.

Además de los trabajos sencillos, en los que los jóvenes han podido implicarse sin problema, la firma Acitania ha aprovechado su estancia en la Casa da Neveira de Lousada para desenvolver tareas más técnicas.

«Retiramos unha estratigrafía dos arrastres, pero iso foi un labor que se realizou en exclusiva polos arqueólogos», indica Israel, quien explica que los jóvenes no sólo se han pasado los días trabajando, sino que también han dispuesto de tiempo libre para recorrer distintos lugares emblemáticos de la provincia.

Dentro de la programación, han podido visitar la capital lucense, el Castro de Viladonga, la playa de As Catedrais o Sotavento. «Ademais foron a Muras, onde tiveron a ocasión de contemplar os traballos de prospección que se fixeron no xacemento do antigo castelo», explica Picón.

Cada día ha sido una experiencia nueva para estos jóvenes, que se marcharán de nuevo a sus casas con las maletas cargadas de momentos inolvidables.

Comentarios