Luís Villares reivindica a Galicia como "una nación alegre y combativa"

El portavoz de En Marea, Luís Villares, ha aprovechado el acto organizado en Santiago, con motivo del 25 de julio, Día da Patria, para reivindicar "una nación alegre y combativa", además de hacer un llamamiento a construir "una alternativa de esperanza" para los ciudadanos. "Ahora es el momento, cuando no hay elecciones", ha apelado.

"Ahora es el momento de construirla, para cambiar un estado de opinión y el día en que vuelva a haberlas, la gente pueda confiar en nosotros como una alternativa viable que plasme lo que quieren para ellos y para sus hijos", ha proclamado, en declaraciones a los medios, en el parque compostelano de Vistalegre.

Bajo la proclama "A Galicia que queremos", representantes de diversos colectivos sociales se han congregado en el acto organizado por En Marea, con un marcado componente lúdico y un 'árbol de los deseos' en el que los participantes han ido depositando mensajes con sus anhelos para Galicia.

En un año marcado por la decisión de las diversas fuerzas nacionalistas y de la órbita rupturista de impulsar actos propios para celebrar el Día da Patria, ha visitado Vistalegre el portavoz nacional de Anova y viceportavoz parlamentario del partido instrumental, Antón Sánchez, junto con otros dirigentes de Anova. Su celebración tenía lugar en una ubicación próxima, en el parque de Galeras.

Tras saludarse, en declaraciones a los medios y en clave política, Villares ha reconocido, preguntado al respecto, que las mareas municipales "funcionan bien" y han enfatizado que "fueron el primer espacio de ensayo ya definitivo de la unidad popular", en el que "no se le pedía carné a la gente para trabajar".

"Es algo de lo que nosotros tomamos ejemplo en En Marea y, por eso, estamos construyendo un espacio permeable en el que tampoco se piden carnés o filiaciones, donde todo el mundo tiene mucho que aportar", ha aseverado.

"DEMOCRÁTICA" Y EN CLAVE PLURINACIONAL. Villares ha subrayado que, tras una primera fase de "impugnación", que era "necesaria", ahora es preciso acometer la "fase de compromiso" y ha llamado a construir "una alternativa de esperanza", empezando porque sea "fuertemente democrática".

En concreto, ha situado como las tres claves: la "ruptura democrática con participación plena de la ciudadanía, la reconfiguración del carácter plurinacional del Estado y un blindaje claro de los derechos sociales, como la renta social básica o una vivienda digna".