El Parlamento de Galicia ha aprobado este martes en pleno el límite de gasto no financiero del Gobierno gallego para el próximo año 2018. El grupo del PPdeG ha votado íntegramente a favor de la medida, mientras que la oposición en conjunto ha rechazado este techo de gasto que fijaría el gasto en 9.487 millones de euros. La cifra supone un aumento de 490 millones de euros respecto a la cantidad fijada el año pasado por la Xunta, y un total de 261 millones sobre la cantidad real una vez se incluyen las cuentas por la incorporación de recursos adicionales.
Este pleno ha sido, pues, la ratificación del acuerdo previo del Consello de la Xunta sobre el techo de gasto de este año, que ha propuesto un aumento proporcional de un 5,4% respecto a su predecesor y un 2,9% más en gasto real que en este 2017. El conselleiro de Facenda, Valeriano Martínez, ha sido el encargado de presentar en la pleno parlamentario dicho plan de control de gasto. Martínez ha explicado que el objetivo del actual Gobierno autonómico es lograr en 2020 una capacidad de gasto de 10.000 millones de euros sin necesidad de recurrir a deudas.
Asimismo, el conselleiro de Facenda ha defendido la "máxima transparencia en la elaboración de sus cuentas anuales" del Gobierno, que por séptimo año consecutivo trae este debate a la Cámara con meses de adelanto sobre la redacción de los presupuestos. El actual techo de gasto, ha añadido, ha sido aprobado por el Parlamento "en el mejor momento económico de los últimos nueve años", en el que Galicia está "consolidando un modelo de crecimiento sano" cumpliendo así con la "hoja de ruta" del "plan estratégico" de la Xunta.
Así, según el conselleiro, el Partido Popular augura una mejora notable de todos los indicadores hasta el punto de que en 2017 haya una "fuerte revisión al alza de la previsión de crecimiento", que sitúa ahora en 3,1 %, siete décimas más de lo inicialmente previsto. Además de esto, ha asegurado que las previsiones para 2018 son de un escenario de "crecimiento equilibrado" en Galicia, donde el PIB supuestamente crecerá un 2,7% y el desempleo bajará en algo más de punto y medio, según sus datos.
'DELEGADO DE RAJOY'. No obstante, la oposición ha rechazado de pleno este techo de gasto y así lo ha demostrado con un contundente desacuerdo. La portavoz del BNG, Ana Pontón, ha tildado el techo de gasto como "disparate centralista" que trata de reducir la autonomía de los gobiernos regionales para "seguir así recortando os servizos públicos e limitando a inversión pública". Asimismo,la nacionalista también ha acusado al presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, de ser un "delegado de Mariano Rajoy en Monte Pío" y de esconderse y negarse a dar explicaciones sobre otros asuntos, como el estado del transporte público en Galicia o el veto del Gobierno central a la transferencia a la Xunta de la autopista AP-9, sobre los que ha centrado buena parte de su discurso.
'ARQUITECTURA DE AUSTERIDAD'. Por su parte, el dirigente de En Marea, Luis Villares, ha considerado el plan de límite de gasto como una forma de prolongar la "arquitectura de austeridad" que "pone el dinero por encima de las personas". Villares ha puesto como ejemplo el caso del suministro de medicamentos, sentenciado que este tipo de premisas financieras causan que paguen "justos por pecadores en términos sociales". Como alternativa, En Marea ha defendido un equilibrio de las cuentas públicas mediante un suelo de ingresos y el concepto de suficiencia fiscal.
'LECTURA POCO AMBICIOSA'. Menos rupturista ha sido la intervención del portavoz parlamentario del PSdeG, Xoaquín Fernández Leiceaga, que, pese a mostrarse medianamente de acuerdo con el mecanismo del techo de gasto, ha considerado que el PPdeG hace una "lectura poco ambiciosa" de la actual coyuntura económica. Para el diputado socialista, la "inercia" de la gestión política del PP "lleva a una reducción progresiva del gasto económico en relación al PIB", ya que el techo de gasto crece menos de lo que lo hace el volumen total de la economía. Leiceaga ha reclamado además una reforma fiscal "seria" que permita conseguir "más ingresos para el conjunto de la Administración" pública gravando progresivamente las rentas más altas.
Por el lado del Gobierno, el portavoz del PPdeG, Pedro Puy ha declarado que la aprobación del techo de gasto es un "motivo de satisfacción" y que es posible porque "Galicia tiene algo que no tienen otras comunidades autónomas", que es una mayoría "sólida" –mayoría absoluta del PP en el Parlamento gallego– que permita cumplir con los plazos, ha dicho.
