Multa de 2.300 euros a un local por tener música y fallos de seguridad

El Ayuntamiento de Lugo decretó este martes una sanción por importe de 2.301 euros al propietario de un establecimiento de la Avenida de Madrid, Xena 65, al que se le imputan cuatro infracciones: la celebración de una actuación musical en directo sin licencia, el funcionamiento de un equipo musical no autorizado, el ejercicio de actividad con deficiencias relativas a la seguridad y la instalación de un futbolín sin permiso. Por cada uno de los tres primeros se le multa con 600 euros, mientras que por el cuarto el importe cae a los 301 euros.

El proceso de denuncia se inició el 27 de enero, cuando la Policía Local comprobó que se estaban produciendo varias de estas infracciones, incluyendo el hecho de que se estaba desarrollando una actuación musical no autorizada y con la puerta de salida cerrada. Los técnicos municipales realizaron una inspección en el local el 13 de febrero, momento en el que detectaron desajustes con lo inicialmente autorizado: la distribución no coincidía con el proyecto, había un único extintor en vez de dos y la luminaria de emergencia no funcionaba. A raíz de ese control, ordenaron la retirada inmediata del equipo musical y del futbolín en un plazo de 15 días.

Los agentes de la Policía Local tuvieron que regresar al local por las denuncias vecinales que, con posterioridad, se repitieron y, de hecho, el 7 de abril precintaron el futbolín y los cuatro altavoces. Diez días más tarde estos cinco elementos habían sido retirados del establecimiento, según consta en el expediente.

CONTROL MÁS INTENSO. El de la Avenida de Madrid se suma a otros casos previos de multas a locales hosteleros este verano. A principios de junio fueron sancionados dos locales de la calle Tui y de la plaza Fernando Casas Nóvoa por exceso de ruidos mientras que a finales de julio cinco bares de la Rúa Nova y otro de Fontiñas también recibieron multas al haber alargado los horarios ilegalmente. De este modo, el Concello prueba haber decidido incrementar notablemente el control sobre el funcionamiento de los locales de ocio nocturno de la capital.