Una nueva vida para las mascotas

Pegadas Solidarias y Os Peludiños realizan una labor encomiable al darle una segunda oportunidad a aquellos animales que han sido abandonados
Voluntarias de Pegadas Solidarias, en el refugio de As Pontes. AEP
photo_camera Directiva de Pegadas

Cada vez son más las personas que muestran una elevada concienciación hacia la protección y el bienestar de los animales. Pero esa mejora en la concepción del humano hacia el perro o el gato no ha logrado todavía que el abandono se erradique por completo. De hecho, esta sigue siendo una problemática constante a la que tampoco son ajenas la comarca de Terra Chá o As Pontes.

Las cifras asustan. Según el último estudio de la Fundación Affinity, en 2016 se abandonaron en España más de 104.000 perros y unos 33.300 gatos, unos números que se mantienen estancados en los últimos años, pero que siguen siendo excesivamente elevados, según apuntan desde la entidad.

Esta opinión también la comparten desde Pegadas Solidarias y Os Peludiños, las dos protectoras de animales que funcionan actualmente en As Pontes y Vilalba.Estas entidades desarrollan una labor encomiable, tan importante como necesaria, que muchas veces no está lo suficientemente valorada, pese a que sus integrantes trabajan a diario sin descanso y de manera totalmente altruista.

Pegadas Solidarias echó a andar a finales de 2014 con el objetivo de abrir un refugio en la localidad pontesa para acoger principalmente a animales que se encontrasen en situación de maltrato o abandono. Durante estos casi tres años han conseguido avanzar en algunas cuestiones, pero todavía queda mucho trabajo por delante, según reconocen.

Por ahora cuentan con un local que han ido mejorando con la ayuda del Concello, quien ha concedido en los últimos años varias subvenciones a la entidad. Las instalaciones se ubican en la antigua Cruz Roja y, aunque inicialmente iba a ser un lugar provisional, por el momento no existe un proyecto definitivo para su ubicación.

«Tener un refugio definitivo sigue siendo uno de nuestros principales objetivos», explica Ana Alonso, la presidenta de una entidad que suma alrededor de medio centenar de socios.

Desde que comenzaron a trabajar han recogido un total de 139 perros. «Entre ellos algunos que estaban perdidos, otros abandonados y algunos que aunque no tenían chip fueron reclamados por sus dueños», asegura, mientras indica que, de todos estos animales recogidos, 89 encontraron un nuevo hogar y una segunda oportunidad.

Es una satisfacción para un grupo de vecinos amantes de los animales que realiza turnos a diario para atender, sacar a pasear y limpiar las instalaciones de manera voluntaria.

Además, y con el objetivo de recaudar fondos, la asociación -que tiene un gasto mensual de atención veterinaria de unos 2.000 euros- ha organizado mercadillos solidarios, además de un desfile canino o caminatas para que los animales puedan salir del refugio y disfrutar de la libertad.

«Los comienzos fueron duros, incluso tuvimos que poner dinero de nuestro bolsillo, pero hemos ido mejorando poco a poco. Con la ayuda del Concello, del centro veterinario Nexo o de particulares, como Belén Galdo que cede sus manualidades, o muchos otros que nos donan alimentos, vamos saliendo adelante», añade Ana, quien precisa que actualmente tienen un total de 13 plazas en el refugio.

Además, asegura que los vecinos de As Pontes se han volcado con la entidad y han ayudado a dar una nueva vida a muchos de los perros que otros, y sin razón, dejaron abandonados en la calle.

En el caso de Vilalba, la asociación Os Peludiños nació a finales de 2015, con el propósito de ayudar a los animales sin hogar, «dándoles un techo, alimento, atención veterinaria y mucho cariño, a la espera de que llegue un hogar definitivo para ellos».

El refugio, que cuenta con nueve caniles, se ubica en la perrera municipal, que ha sido objeto de unas obras a finales del pasado año. Eran trabajos necesarios, según apuntan desde la entidad, desde donde reconocen que la situación en la que se encontraban los animales no era adecuada.

Desde su constitución, Os Peludiños ha recogido «uns 40 animais ao ano», lo que se traduce en alrededor de 80 abandonos en apenas dos años. De estos, «salvo dous ou tres casos, todos atoparon adoptantes», asegura Ana Paredes, la presidenta de la entidad, mientras explica que las adopciones se realizan mayoritariamente en Galicia, «xa que así temos a seguridade de poder facer un control».

Los voluntarios, al igual que en Pegadas Solidarias, también juegan un papel fundamental dentro de la asociación vilalbesa, ya que son los que se encargan de «limpar, peitear e sacar a pasear os animais», indica Ana.

Para recaudar fondos, Os Peludiños ha organizado mercadillos solidarios, quedadas y ha instalado objetos a la venta en comercios vilalbeses, así como huchas. Además, también ha impartido clases de concienciación en los centros educativos de la localidad, un trabajo que ha ido dando sus frutos.

«Sempre que facemos algunha comunicación no Facebook Os Peludiños.Vilalba, a xente axúdanos, estamos moi contentos», reconoce Ana, mientras confirma que la entidad está inmersa en los preparativos de una fiesta de Halloween en la que también buscarán conseguir dinero para seguir luchando por el bienestar de los animales que todavía no han encontrado una familia.

OTROS SERVICIOS. Además de las dos protectoras, la comarca chairega cuenta con otros servicios destinados a los animales. Así, en 2015 se creó en Xermade el primer refugio de toda Terra Chá con capacidad para 120 perros. La gestión corre a cargo de Animals Help, que tiene contactos con asociaciones europeas y que ha firmado convenios de colaboración con algunos concellos, como Guitiriz, Abadín o Mondoñedo.

Este mismo verano, en la parroquia de Duancos, en Castro de Rei, se inauguró el primer hotel para animales de la comarca. Las instalaciones, promovidas por Tatiana Redondo y ubicadas en un edificio de nueva construcción, cuentan con un total de 17 plazas.

En este caso, la atención es totalmente individualizada. Una vivienda en exclusiva para los animales en la que disponen de todas las comodidades.

En As Pontes, además, Solcan Galicia desarrolla clases de adiestramiento canino desde hace un tiempo y promueve también cursos teórico-prácticos sobre cómo gestionar la agresividad o cómo tratar a un cachorro, entre otras cuestiones. El próximo taller que desarrollará la entidad será este sábado, día 7, en sus instalaciones en Lourentín.

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