Un corredor de fondo. Un luchador infatigable. Definitivamente, un ganador. Quizá el más importante representante en Lugo del noble arte del boxeo en el comienzo del siglo XXI, Alberto Piñeiro, 'O Piña', campeón de España de boxeo en la categoría de peso medio, lleva casi doce meses de triunfos y premios, merecidos sin duda después de años de trabajo duro y en silencio. Uno de los momentos cumbres de este último año tuvo lugar este miércoles, cuando el lucense recibió en el auditorio Gustavo Freire uno de los galardones que, seguro, recibió con más cariño, y también con honor, el de ganador del Deportista Lucense de 2017, el primer boxeador que se lleva el premio, ceremonia que El Progreso organiza desde el año 2005.
O Piña, que anunció este miércoles su retirada definitiva, supo levantarte tras una dura derrota hasta proclamarse campeón de España
No hay duda de que Alberto Piñeiro se ha merecido un trofeo que, un año más, conceden los lectores de este periódico, siempre pendientes de sus deportistas allá donde estén, como el propio diario de Lugo, que desde hace más de cien años canta y cuenta las hazañas de los suyos. O Piña fue elegido mejor deportista del año 2017 para Lugo, uno de los hombres más queridos por unos aficionados que le han agasajado constantemente desde que hace casi un año, el 19 de noviembre de 2016, conquistase en el Palacio Municipal de los Deportes de Lugo el campeonato de España del peso medio.
Pocos deportistas de Lugo en esta segunda década del siglo XXI han demostrado más motivos para ganar el trofeo y, al tiempo, vivir un día a día de lo más modesto que se conoce. Sin estridencias, sin alharacas, con mucho trabajo y en silencio. Así es Alberto Piñeiro, que lo mismo pelea por un título de campeón de España como ayuda para colocar en su sitio los aparatos utilizados para entrenarse en el gimnasio. El campeón de España de peso medio conquista el triunfo un viernes por la noche, ya sábado de madrugada, y el lunes por la mañana, poco más de 48 horas después de un deporte tan exigente como el boxeo, trabaja en el mantenimiento y limpieza de las gradas del Ángel Carro. Así, tan humilde, tan trabajador, tan sano es el campeón nacional.
Larga ha sido la carrera deportiva de O Piña, que después de conquistar el campeonato de España y recibir los premios correspondientes vive en la actualidad un paréntesis antes de buscar nuevos proyectos, fuera ya del boxeo de forma definitiva, como él mismo dio a conocer este mismo miércoles, durante la entrega de los premios celebrada en el auditorio Gustavo Freire.
Especial de los Premios El Progreso ao Deporte Lucense en la edición impresa de este jueves
