Su proyecto mas inmediato, una serie para la NBC

El actor Carlos Leal, de Hollywood a Viveiro

Papeles en la peli de James Bond 'Casino Royale', en 'Los abrazos rotos' de Almodóvar o en la serie 'El internado' engrosan el currículum de este actor suizo de padres vivarienses y asentado actualmente en Los Ángeles. Estos días rodó 'To the Sea' en la comarca
El actor Carlos Leal, en el parque Pernas Peón de Covas
photo_camera El actor Carlos Leal, en el parque Pernas Peón de Covas

"GALICIA me está llamando", dice el actor de origen vivariense Carlos Leal, que dejó por unos días Hollywood para participar en el rodaje del corto To the Sea del director alemán Julian Grünthal entre Viveiro y Xove. "Cuando me dijo que iban a grabar la peli en Viveiro dije: 'Me tengo que arreglar para hacerla, tengo que venir'. Y fue difícil porque estaba con distintos temas en Los Ángeles", relata el actor, que ya concluyó su participación en el rodaje.

Los padres de Leal, ambos vivarienses, emigraron a Suiza en los años 60 y él nació allí, pero apunta que en verano siempre venían "a la aldea en Viveiro o a A Coruña, a ver a mis tíos y mis primos y a pasármelo bien", dice con una sonrisa mientras recuerda que iba "a la playa, a coger cangrejos, a las fiestas... Todos esos recuerdos están muy lejanos pero de repente este año parece ser que Galicia me llama", comenta en referencia a que, tras unos ocho años sin pisar la tierra de la morriña, en mayo vino para grabar un programa para la TVG de la mano de la actriz, también nacida en Suiza, Isabel Blanco. "Me quiso traer aquí para hacer un documental que se estrena pronto y se llama Pasaporte Galego" avanza.

Ese proyecto "no tiene nada que ver" con el corto de Grünthal, aunque hay puntos en común como el tema de la emigración. "El guion de Tho the Sea es buenísimo, trata un tema muy importante hoy en día que es la crisis migratoria pero lo hace de una manera muy sutil porque la trama no es esa, la trama es una mujer que se muere de soledad y que no ve el amor que está dispuesta a darle un hombre", al que él da vida, un policía local que "es un hombre muy solo, muy introvertido y también un poco cabezón, un poco como 'os galegos' ", bromea. En este rodaje también participó con un pequeño papel Isabel Blanco, a quien Leal ya conocía de hacía años y puso en contacto con el director. "Es genial toda esta conexión", reflexiona.

El rodaje de Tho the Sea fue "fantástico", dice Carlos Leal, que se quedó maravillado con el Portiño de Morás: "Ese puerto nunca lo había visto, ¡qué cosa más preciosa! Es super bonito, super pintoresco y para una localización de película es un regalo".

El actor asegura que siempre recuerda sus orígenes y no se deja llevar por la fama: "En Hollywood hay mucha tontería", dice

No es era la primera vez que Carlos Leal se enfundaba en un uniforme de policía, ya que también interpretó ese rol en otras series como Mentres criminales: sin fronteras, en un capítulo emitido en Cuatro este año, o en RIS Científica, la CSI nacional de Tele 5. Sin embargo, la mayoría de los papeles de este actor han sido "de malo, malísimo", como el de Jacques Noiret en El internado de Antena 3, una serie "que pegó mucho no solo aquí, sino en países latinoamericanos, Rusia, Croacia... sitios increíbles", cita.

Un punto fuerte en su currículum es la participación en la película de James Bond Casino Royale, donde hacía de crupier. "Aunque antes hice algunas otras películas, ayuda mucho porque si de repente estás en una de James Bond ya te consideran realmente un actor, es algo icónico, y eso que en esta tengo un papel pequeño", señala Leal, que también participó en la película Los abrazos rotos de Almodóvar durante su etapa en Madrid. "Acababa de llegar a España desde París y poco tiempo después estaba trabajando con él. Fue un momento de pensar 'qué suerte tengo', aunque fuera un papel pequeño daba igual. Estar un día en el set con Almodóvar para mí fue un regalo", asevera.

Carlos Leal también es músico y fue muy conocido especialmente en Suiza con su grupo Sens Unik, que sumó cinco discos de oro. "Tenía 18 o 19 años y la fama llegó pronto. Tuve que enfrentarme a la mirada de los otros, esas ganas de que te amen, y eso también a veces me dirigió a sitios malos", reconoce. Esta experiencia le sirvió para continuar su carrera con otro aplomo y no dejarse llevar por el lado pomposo de la fama. "En Hollywood hay mucha tontería. Ser un actor hollywoodiano, si; morirme tonto, no", dice Carlos Leal, quien resta importancia a aparecer en revistas o a la 'red carpet' y apuesta por el amor real hacia el oficio de actor: "Es un trabajo interesante porque te da la posibilidad de entender la psicología y el alma de otros seres humanos y de crecer espiritualmente como persona", asegura Leal, que cree que los actores, directores y artistas europeos no tienen nada que envidiar a los americanos, más bien al contrario.

La intención del actor es continuar en Los Ángeles. "Aunque mi estrategia de carrera internacional casi debe pasar por Hollywood, no me olvido de donde vengo y nunca me olvidaré", recalca.

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