El sindicato UGT mantuvo ayer una reunión con los trabajadores afectados por el Ere de Explotaciones Cerámicas Españolas (Ecesa) en su planta de Burela, que hace pocos días anunció el expediente, que afecta a 30 empleados, así como el despido de otros 10. Sobre este último punto UGT, que representa a toda la plantilla, señaló que va a iniciar una defensa individual de muchos de los casos, ya que considera que los despidos se deben a que los empleados afectados habían denunciado a la empresa.
«Temos catro casos nos que hai unha sentenza favorable ós traballadores por parte do TSXG que Ecesa non cumpríu nunca. O que está claro é que a empresa perseguíu a todos aqueles que defenderon os seus dereitos», señaló Xoan Carlos Piñeiro, responsable comarcal de UGT. El sindicato elaborará también un recurso de súplica en el que se pide la impugnación del Ere «por feitos probados». La argumentación sobre este punto se cierne en que la firma no ha perdido un cliente, sino que temporalmente no realizará encargos. La empresa, inmersa en un concurso de acreedores, justificaba esta decisión en base al volumen de facturación perdido por un incendio en una firma noruega que es su principal compradora. Sin embargo, a este respecto el sindicato alega que los trabajadores realizaron «3.000 horas extras», por lo que considera que realmente sí hay una carga importante de trabajo.
Sin negociación
El sindicato indicó también que ya no habrá más reuniones con Ecesa «porque a empresa non ten ningún tipo de disposición a negociar cos traballadores», indicó Piñeiro.
La firma no realizó ninguna manifestación al respeto y las alegaciones podrían no estar respondidas hasta después del verano. «Consideramos que temos a razón porque a sentenza non argumenta nada e non ten nin siquera uns mínimos fundamentos», explicó Piñeiro, de UGT.
