La TDT cumple este domingo tres años de su implantación en España donde más del 89,15 % de la población se encuentra ya en zonas con cobertura, según los últimos datos de Impulsa TDT.
El 30 de noviembre de 2005 comenzaron las emisiones con la asignación de las frecuencias de ámbito nacional que estaban disponibles desde el cierre de ''Quiero TV'' y el inicio de las emisiones de los canales que se sumaban a los que ya estaban emitiendo desde 2002, para sumar una oferta de 20 canales nacionales en TDT.
Apagón analógico
Por medio del Plan Técnico Nacional de Televisión Terrestre, se fija el 3 de abril de 2010 como fecha de cese de las emisiones de televisión analógica terrestre.
También establece un cronograma de ampliación de la cobertura hasta alcanzar niveles del 95 % y 98 % de la población en 2010 con una serie de hitos intermedios.
Tres años después de su implantación y a dos años del apagón analógico, quedan cerca de 200 días para el apagado de la televisión analógica al 12,6 % de la población, 400 para el 20,2 % y menos de 500 días para el 67,6 % restante, según los últimos datos de Impulsa TDT.
Transición hacia la TDT
La Asociación para la Implantación y el Desarrollo de la Televisión Digital Terrestre en España, nombre comercial de Impulsa TDT, se constituyó a finales de 2005 con la finalidad de promover la televisión digital terrestre y el proceso de transición hacia la TDT en España.
La Asociación, está integrada por RTVE, Telecinco, Sogecable, Antena 3, La Sexta, Net TV y Veo Televisión, la FORTA y por el operador de red Abertis Telecom.
Según datos de la Federación de instaladores de Telecomunicaciones, Fenitel, el número de hogares que ya recibe la TDT asciende a unos 6,7 millones, lo que permite que 9 millones de individuos se conecten diariamente con la TDT, alcanzando ya una audiencia del 18,3 % del total de cuota de pantalla, un punto más que el mes anterior.
Para dar un mayor refuerzo al lanzamiento de la TDT el próximo día 7 dará comienzo una campaña de comunicación sobre la televisión dixital terrestre que supondrá al Gobierno un coste de seis millones de euros.
