Próxima parada, Padrón: Los obreros del metal hacen un alto en su Camino

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La marea humana de 2.000 trabajadores del metal que se echaron este lunes a las carreteras para exigir la resolución del conflicto laboral del sector en la provincia de Pontevedra, hacen parada y fonda esta noche en diferentes instalaciones deportivas de Padrón y de Pontecesures.

Los caminantes pernoctarán allí para recuperar fuerzas con vistas a los kilómetros que les esperan el martes, cuando pretenden inundar Santiago de Compostela con sus reivindicaciones de subida salarial y de una negociación que permita poner fin a la huelga y concluir un nuevo convenio colectivo.

Compañerismo y buen humor
Los huelguistas salieron a las 08:00 horas de Vigo para reunirse en Pontevedra con sus compañeros de esta ciudad, el Morrazo y O Salnés. Durante su recorrido causaron importantes problemas en el tráfico rodado en la N-550 entre Pontevedra y Caldas de Reis.

Tras una parada para comer en Caldas, los trabajadores siguieron su caminata en un ambiente de camaradería, compañerismo y buen humor. Todo peregrinaban con una mochila que guarda el mono con el suelen trabajar porque, según avanzaron los sindicalistas de CIG, entrarán en Santiago con el traje de faena.

Y es que el martes harán un último esfuerzo rumbo a Santiago, a donde si las previsiones se cumplen llegarán al edificio de San Caetano sobre las 14:00 horas. Decenas de trabajadores de Vigo se han inscrito ya en la lista de esta peculiar marcha durante la asamblea informativa celebrada al término de la decimoctava jornada de huelga.

A pesar de la peregrinación a Santiago en Vigo quedó un retén de trabajadores en Vigo que ha cortado el tráfico interminentemente en la zona de Beiramar.Entre treinta y cuarenta huelguistas formaron esos piquetes que cortaron temporalmente el tráfico delante de los principales astilleros.

Negociar ''correctamente''
El responsable de CCOO del Metal, Ramón Sarmiento, indicó que estaría bien que haya negociación antes del 30 de junio, fecha tope dada por los mediadores de la Xunta para que tanto patronal como sindicatos den respuesta a una propuesta de incremento salarial diseñada por ellos. Desde UGT, su portavoz Manuel Golpe reiteró que la huelga indefinida continuará.

Ante quienes critican que pidan una subida salarial del 4%, el portavoz de CIG, Antolín Alcántara, subrayó que cuando se planea una huelga por una exigencia ''ya somos conscientes de las posibilidades económicas que hay y a las que pueden llegar las empresas implicadas en el conflicto''.

En este sentido aseguró que las empresas que puedan demostrar pérdidas económicas o que estén en una situación de insolvencia, podrían negociar con sus delegados sindicales la salida temporal de la huelga, por lo que reclamó a la patronal que ''asuma su capacidad para poner fin a esta situación, negociando correctamente''.

En cuanto al papel de la Xunta, Alcántara insistió en que es ''mejor que se estén callados, porque lo único que consiguen con sus declaraciones es poner más nerviosos a los trabajadores y dar ánimos a la patronal y por ahí no van a conseguir una solución''.

Vuelta al trabajo en O Salnés
Por su parte, los trabajadores del metal en la comarca del Salnés continuarán trabajando hasta el miércoles día 1 de julio, cuando mantendrán una nueva asamblea, según un portavoz.

El motivo de esta decisión de vovler al trabajo es que están ''cansados de los sindicatos y de los incidentes'' que se registran en Vigo, explicó, añadiendo que ''la gota que colmó el vaso'' fue que miembros de la CIG actuaran de piquetes la semana pasada, una acción que dejó agresiones y ruedas rajadas en los concesionarios de vehículos de la recta de Rubiáns en Vilagarcía , según aseguró el portavoz

''Ellos lo guisan y se lo comen sin contar con los demás, y en el Salnés hay muchas empresas y queremos que nos tengan en cuenta'', destacó.

En respuesta a esta decidión, el portavoz de CCOO en la comarca de Arousa, Fernando Ramos, señaló que ''los trabajadores de la pequeña y mediana empresa están perdiendo de trabajar, gastando dinero en gasolina trasladándose de un lugar a otro, no lo ven claro y decidieron retornar a las empresas. Son gente de todos los sindicatos y nosotros no somos sus jefes ni actuamos como militares''.

La huelga del sector metal en la provincia de Pontevedra, que afecta a unos 27.000 trabajadores del sector, alcanza este lunes la decimonovena jornada sin perspectivas de un posible acuerdo para un nuevo convenio colectivo, pese a más de tres meses de negociación entre patronal y sindicatos.

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