El juzgado de primera instancia de Becerreá ha rechazado la petición de la comunidad de montes de Pintinidoira (As Nogais), que reclamaba 112 hectáreas de terreno pertenecientes a sus vecinos de Pedrafita. La jueza Jimena Couso Rancaño considera que los demandantes no han probado "plenamente" que los montes que reclaman les pertenecen.
Los vecinos de Pintinidoira pedían que el juzgado autorizase una modificación del deslinde actual y que se registrase a su nombre la zona denominada Tras do Campo-Reboleira, también conocida como A Travesa, que en la actualidad figura como propiedad de la comunidad de montes de Pedrafita. Como prueba de titularidad, se remitían al catastro del Marques de la Ensenada, entre otros documentos.
La comunidad de montes de Pedrafita rechazó esta petición y pidió a la jueza que considerase como buenos los límites establecidos en el deslinde entre los municipios de Pedrafita y As Nogais. Aportó como pruebas de propiedad escrituras de finales del siglo XIX y principios del XX, que coinciden con una sentencia del juzgado de Becerreá del año 1867, en la que tres peritos delimitaron el perímetro total del monte de Pedrafita. El Instituto Topográfico Nacional fijó los mismos límites en 1943 y en 1977 fue el Jurado Provincial de Montes quien marcó la línea divisoria que actualmente rige entre ambas comunidades de propietarios, que también coincide con la defendida por los vecinos de Pedrafita.
En base a estos documentos y ante la imposibilidad de la parte demandante de demostrar la propiedad plena del territorio que reclamaba, la jueza estima que "debe mantenerse el deslinde practicado por el Jurado Provincial, pues no se advierte error en la línea divisoria", que coincide con los límites municipales de As Nogais y Pedrafita.
La comunidad de montes de Pintinidoira ha recurrido esta sentencia ante la Audiencia Provincial de Lugo, por lo que el proceso no ha quedado cerrado.
Continuos pleitos
Los terrenos limítrofes entre Pedrafita do Cebreiro y As Nogais han suscitado continuos litigios en los últimos diez años. El más sonado terminó con el levantamiento de las tuberías de agua que surtían a los núcleos de Pintinidoira, A Lagúa y Fonfría, que procedían de manantiales de León y habían sido instaladas sin permiso por el Concello de As Nogais en montes de Pedrafita.
Los vecinos de uno de estos núcleos, Pintinidoira, son quienes reclaman ahora la propiedad de las tierras por las que pasaba la polémica traída de aguas. Según los límites que proponen, el municipio de As Nogais lindaría con la provincia de León, no con Pedrafita como está estipulado en la actualidad.
El presente litigio podría invertir los actores del anterior, pues de los montes que reclaman los vecinos de Pintinidoira parte la traída de aguas de Pedrafita. En caso de que la Audiencia Provincial falle en sentido contrario al juzgado de Becerreá y reconozca a los demandantes la propiedad del monte, las captaciones de agua quedarían dentro del territorio de As Nogais.
Clave del litigio
Unas 82 hectáreas de las 112 que reclaman los vecinos de Pintinidoira están plantadas con pinos, que la comunidad de montes en mancomún de Pedrafita valora en unos 300.000 euros.
La explotación maderera se realizó en consorcio con el Estado desde el año 1955 y, a partir del 2004, la Xunta de Galicia asumió el convenio de colaboración.
Los comuneros de Pedrafita critican que cuando se plantaron los pinos en el monte "nadie lo reclamó, ni tampoco mientras estuvieron creciendo, pero ahora que puede generar ingresos es cuando lo quieren".
