El BNG focense daba a conocer ayer que los integrantes de la asociación de discapacitados Virxe do Carme de Foz estaban desatendidos desde que el 18 de enero finalizara el contrato del maestro-pedagogo con el que trabajaban. Sin embargo, desde el propio colectivo quisieron desmentir este extremo y aseguran que el mismo día en que se terminó el contrato de ese trabajador, los padres fueron convocados a una reunión en la que les explicaron que otra chica se encargaría de hacer ese trabajo de forma provisional.
Por su parte el alcalde, José María García Rivera, confirmó la información de la asociación y aseguró que el gobierno municipal «nunca deixa abandonados a estes rapaces, de modo que se puxo inmediatamente unha persoa capacitada para atendelos e con titulación». Lo que dice el BNG, añade, «é totalmente falso».
El Bloque reclama también la cesión de un local de la Casa do Mar para el uso de este colectivo, pues no hubo avances desde que la secretaria xeral de Familia e Benestar visitó las instalaciones hace más de dos meses y contempló esa posibilidad.
Desde Virxe do Carme recuerdan que en la actualidad están utilizando para sus actividades un aula multiusos en el edificio de servicios sociales y que el local de la Casa do Mar que se les cedería es una sala de exposiciones que, una vez construido el Cenima, no tiene uso.
Consideran además que es una estancia «estupenda, con baños muy amplios para entrar con sillas de ruedas; el local está muy bien». Los padres esperan que este trámite llegue a buen puerto, pues es un viejo compromiso por parte de distintas formaciones desde hace ya varios años. «Están intentando politizarnos y este local nos lo han prometido, pero no nos lo creeremos hasta que nos den las llaves», dicen.
