El Consello de la Xunta ha aprobado hoy el anteproyecto de ley de movilidad de tierras, que tiene como objetivos dar más facilidades para redimensionar las explotaciones, beneficiar a los propietarios que no dedican sus tierras a cultivos o ganadería y hacer del Banco de tierras un instrumento de conservación natural.
El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, y el conselleiro de Medio Rural, Samuel Juárez, presentaron en conferencia de prensa el anteproyecto de esta ley, que "huye del intervencionismo de la ley anterior", en opinión del titular de Medio Rural, al eliminar el derecho de tanteo y retracto que existía en la normativa aprobada la pasada legislatura.
Según Juárez, en Galicia existen unas 320.000 parcelas de propietarios desconocidos, por lo que esta nueva normativa pretende que el banco de tierras sea un instrumento "más dinámico para poner a disposición de los ganaderos o agricultores interesados estos terrenos".
El departamento que dirige Juárez está en conversaciones con Patrimonio del Estado para poder investigar la propiedad de estos terrenos sin dueño, para poder incorporarlos al Banco de Tierras y gestionarlos.
Una de las intenciones de la nueva normativa es "potenciar" el papel del Banco de Tierras, "que no desaparece", según indicó el conselleiro de Medio Rural, sino que será gestionado por Agader y no por Bantegal, una sociedad mercantil creada la pasada legislatura y que está "en extinción".
Juárez indicó que el Banco de Tierras es un instrumento de "intermediación" por lo que el propietario de las tierras no pierde su titularidad.
En el Banco de Tierras existen dos tipos de parcelas, las que ceden los propietarios en alquiler para ser destinadas a producciones ganaderas o agrícolas y las que son propiedad del propio organismo, obtenidas como masas comunes a través de concentraciones parcelarias.
El conselleiro explicó que el precio de estas parcelas para la personas que quieran ampliar sus explotaciones está "congelado" desde 2009, fecha desde la que se han cedido al Banco de Tierras 1.231 parcelas, de las que 447 procedían de particulares y 784 procedentes de masas comunes.
En este tiempo, se han arrendado 660 parcelas desde el Banco de Tierras, un organismo que el conselleiro desea que aumente su actividad tras la reforma legislativa.
Por otra parte, el Gobierno gallego aprobó hoy mantener y ampliar una línea de avales para dotar de liquidez a las pequeñas y medianas empresas, con el objetivo de dar una solución al "estrechamiento de las cañerías del crédito" de las entidades financieras.
Según Núñez Feijóo, con estas operaciones la Xunta está haciendo "lo que deberían hacer las entidades financieras" y ha convertido en "normal" lo que antes se consideraba "excepcional", que es avalar las operaciones de las empresas.
El presidente gallego afirmó que los avales concedidos en los últimos dos años por el Instituto Gallego de Promoción Económica (Igape) equivalen al 90 por ciento de la cantidad avalada por este organismo en los quince años anteriores.
Xogador do Folgueiro
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21/abr./24
