Opinión

Referencia de estabilidad

ANTE LAS elecciones alemanas de este domingo no hay preocupación frente a lo que sucedió con las últimas citas con las urnas en varios países europeos, incluidos los nórdicos. El caso de Francia, con el ascenso de la ultraderecha antieuropea del FN, es un buen ejemplo de la alarma general que existió hasta que Europa respiró aliviada con el triunfo de Macron. Los sondeos y la percepción general dicen que Angela Merkel gana las elecciones como para repetir en la cancillería y situarse en camino de igualar en la permanencia en el cargo a Helmut Kohl (16 años).

El panorama de la política alemana es de estabilidad, con independencia de quien sea el socio de gobierno de los cristianodemócratas de la señora Merkel. Es una líder europea. Se dice incluso que es la mujer más poderosa del mundo. Ante la crisis de los refugiados asumió como mandataria los riesgos electorales de abrir Alemania como tierra de acogida. Fueron otros países los que levantaron alambradas. Las elecciones de este domingo son de alguna forma un test para esa política, que encontró rechazo entre los suyos, que supuso la acogida de un millón de refugiados. Humanismo, sin duda. Y aportación al crecimiento de la economía alemana.

La estabilidad política de Alemania la da su práctica de pacto. Antes fue con los liberales, que pudieran volver ahora al gobierno, como partido comodín para las dos fuerzas mayoritarias, la CDU y el SPD. Y política de pactos ahora, en este nuevo escenario político de pentapartidismo que trajo la depresión económica, con la Grosse Koalition entre los dos grandes partidos. Además de lo anterior, en el contexto actual español interesa otra mirada a Alemania, el funcionamiento sin ruIdos del reparto federal, con 16 estados (Länder), así como el transcurrir de la política. Un detalle, el Tribunal Constitucional está en Kalsruhe, no en Berlín. Y el BCE, como el Federal, en Fráncfort.

Comentarios